En el contexto de las actividades organizadas por el Día Internacional de la Mujer, la Delegación de la Unión Europea en Venezuela participó este miércoles 6 de marzo en el «Carrusel de Alternativas Feministas de Producción para la Vida», una actividad donde diferentes grupos de mujeres en situación de vulnerabilidad de 7 parroquias de Caracas, han podido intercambiar conocimientos sobre proyectos socio productivos sostenibles que garanticen empleos y vidas dignas.
El jardín del Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Armando Reverón, fue el escenario donde se llevó a cabo la Exposición de experiencias y proyectos de medios de vida para mujeres, así como el Conversatorio con las personas que forman parte de la Cooperativa Transformación, Mujeres y Comunidad (TRAMUCO).
«El Día Internacional de la Mujer es una fecha para hablar de equidad de género, de derechos y oportunidades, y este proyecto que estamos implementando es un ejemplo de ello, con el que más de 3600 personas en situación de exclusión se están viendo beneficiadas», señaló Rachel Roumet, Encargada de Negocios de la Delegación de la UE en Venezuela.
El evento también contó con la participación de Mariarita Ceccaroni, Coordinadora País de Cooperazione Internazionale (COOPI) Venezuela, y de Daniela Inojosa, Coordinadora de Tinta Violeta.
Esta actividad forma parte del proyecto de cooperación «Garantizar un sistema de gestión participativa de residuos sólidos urbanos manejados por mujeres en el Distrito Capital», que actualmente lleva a cabo la organización COOPI en alianza con la A.C. Tinta Violeta, y que cuenta con financiamiento de la UE.Algunos detalles del proyecto.
Este proyecto se está implementando actualmente en 7 parroquias del municipio Libertador, con el objetivo de contribuir a mejorar las condiciones de vida y la resiliencia de la población venezolana, promoviendo la participación ciudadana a nivel comunitario en la rehabilitación de servicios básicos y creación de medios de vida.
Cabe destacar el hecho de que el proyecto prioriza a 72 mujeres en situación de exclusión educativa, social y laboral, en riesgo, víctimas y sobrevivientes de violencia basada en género.
Asimismo, numerosas organizaciones comunitarias se han visto beneficiarias, alcanzando a más de 3600 personas con este proyecto.
El mismo también contempla el apoyo para la creación de oportunidades de ingresos para estas mujeres a través del manejo y gestión de residuos sólidos urbanos, fortaleciendo así sus capacidades tanto técnicas como empresariales.
Al mismo tiempo, se está reforzando el sistema de participación comunitaria para el acceso y contraloría social de este servicio de aseo urbano y recolección de residuos, que está manejado por mujeres en coordinación con las autoridades locales.