Las mujeres que gestionan explotaciones agrarias y hogares rurales en países pobres sufren más por el cambio climático y se ven discriminadas cuando intentan adaptarse a otras fuentes de ingresos en épocas de crisis, según advirtió este martes la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Un nuevo reporte de la FAO, “El clima injusto”, encontró que los hogares rurales encabezados por mujeres pierden de media un 8% más de ingresos durante las olas de calor y un 3% más durante inundaciones, en comparación con hogares liderados por varones.
Esa disparidad supone una reducción per capita de 83 dólares debido a los golpes de calor y de 35 dólares por inundaciones, lo que supone un total anual de 37.000 millones de dólares y 16.000 millones de dólares, respectivamente, en países pobres, según indicó en su informe la agencia de Naciones Unidas para la alimentación y la agricultura.
La FAO, con sede en Roma, elaboró sus estadísticas tras encuestar a 100.000 hogares rurales en 24 países de ingresos bajos e intermedios de todo el mundo. La agencia cruzó después esos datos con la información de temperaturas y precipitaciones durante 70 años.
En un detalle significativo, el reporte señaló que pocas medidas gubernamentales para combatir el cambio climático y fomentar estrategias de adaptación tienen en cuenta las vulnerabilidades específicas de las mujeres y jóvenes rurales.
Apenas el 6% de las más de 4.000 propuestas revisadas de los planes nacionales de adaptación climática de los países mencionaba a las mujeres.