Brian Nichols, subsecretario de Estado de Estados Unidos para el hemisferio occidental, afirmó que la «intimidación a la disidencia en Venezuela» exacerba la crisis que atraviesa el país. El funcionario manifestó su «preocupación» por este hecho a través de su cuenta de X, anteriormente Twitter.
Sus declaraciones surgieron luego de la expulsión del personal de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Caracas.
Nichols calificó la situación como «alarmante. También destacó que la expulsión del personal de la ONU-DDHH en Venezuela es un indicativo de que la «crisis política se acentúa».
“La expulsión del personal de la @ONUDerechosHumanos de Venezuela es alarmante. La creciente intimidación de las voces disidentes exacerba las crisis humanitaria, política y económica de Venezuela”, escribió.
Nichols se une a los políticos nacionales e internacionales que recientemente han condenado la decisión de Nicolás Maduro de expulsar al personal de la oficina de la ONU.
La administración de Maduro, por su parte, argumentó que suspendió las actividades de la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos por considerar que “instrumentaliza» su trabajo en contra del Ejecutivo.