El gobierno suspendió las actividades de la oficina técnica de asesoría del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas en Caracas y pidió a su personal abandonar el país en las próximas 72 horas, “hasta tanto rectifiquen públicamente ante la comunidad internacional su actitud colonialista, abusiva y violatoria de la Carta de las Naciones Unidas”, anunció este jueves el Canciller Yván Gil .
En efecto, en declaraciones a los medios desde la Casa Amarilla, el titular de Relaciones Exteriores leyó el comunicado del Gobierno en el que anunció la decisión por el “propio papel” que dicha oficina ha tenido y que ha violado el acuerdo que firmó en el que está establecido que no se puede inmiscuir en los asuntos internos. “Hemos visto y es público y notorio a través de comunicados de la oficina técnica en Venezuela de presiones que han hecho a nuestros poderes públicos”.
“La vemos muy activa cuestionando el accionar de los órganos del Estado y esto no es tolerable”, afirmó Gil quien recordó que el 20 de septiembre de 2019 el Ejecutivo inició una cooperación con la oficina del alto comisionado de derechos humanos que permitió que se instalará en Caracas una oficina sede que “hoy cuenta con 13 funcionarios y se le ha dado la mayor colaboración sin restricción de ningún tipo porque en Venezuela no tenemos nada que ocultar y estamos orgullosos del tratamiento que le damos a los derechos humanos”.
Aclaró que el gobierno seguirá teniendo cooperación con la oficina del Alto Comisionado en Ginebra y que se revisará en los próximos 30 días los términos del convenio de la oficina en Caracas.
“Nosotros mantenemos todos nuestros compromisos en materia de derechos humanos, la decisión es administrativa, que suspende la oficina que se ha desviado de su mandato, se ha instrumentalizado para ser una caja de resonancia de la oposición de extrema derecha venezolana”, precisó el Canciller venezolano, Yván Gil.