En su reciente rendición de cuentas ante la Asamblea Nacional, el líder del régimen venezolano, Nicolás Maduro, anunció la designación de Alex Saab como el nuevo presidente del Centro de Inversiones Productivas de Venezuela.
Durante su discurso, Maduro reconoció a Saab como “un hombre inocente” y ratificó su condición de diplomático venezolano. Además, insistió en que Saab fue sometido a torturas en la cárcel de Cabo Verde y más adelante en la prisión en la que fue recluido en Estados Unidos, luego de ser extraditado por el gobierno africano.
Saab, quien anteriormente había sido acusado de ser un supuesto “testaferro” de Maduro, estaba siendo juzgado en Estados Unidos hasta que fue canjeado, como lo reconoció el propio mandatario venezolano en su discurso, por presuntos “terroristas” estadounidenses presos en Venezuela.
Al dar a conocer la designación, Maduro expresó su esperanza de aprovechar la “experiencia internacional” de Saab para atraer inversiones a Venezuela. Antes de su detención, Alex Saab era un empresario cercano al gobierno que realizaba compras internacionales para los programas sociales del Ejecutivo, especialmente los relacionados con la distribución de alimentos.
La designación de Saab marca un nuevo capítulo en la política económica de Venezuela, mientras el país busca atraer inversiones para impulsar su economía. Sin embargo, la noticia ha generado controversia debido a las acusaciones previas contra Saab y su reciente canje.
