En la primera semana de enero, al menos 5.709 migrantes, en su mayoría de Venezuela, entraron de manera irregular a Honduras, según informó el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) del país centroamericano.
De acuerdo con el Conadeh, de los 5.709 migrantes registrados, 1.130 son de Venezuela y 948 de Cuba, mientras que el resto provienen de otros países de la región y del mundo.
De acuerdo al organismo, los venezolanos que llegaron a Honduras tienen como destino final los Estados Unidos, donde esperan encontrar oportunidades de trabajo, educación y salud que les permitan reconstruir sus vidas.
El Conadeh señaló que entre 2010 y lo que va de 2024, por Honduras transitaron 870.940 migrantes, procedentes del Caribe, Centroamérica, América del Sur, África y Asia.
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De esa cifra, 733.901, que representan el 84%, lo hicieron entre 2022 y 2023, lo que evidencia el aumento exponencial de los flujos migratorios en los últimos años, destacando, además, que de los migrantes que cruzaron el territorio hondureño en los últimos catorce años, 484.711 son hombres, 222.865 mujeres, 73.229 niñas y 90.135 niños.
«Solo en el 2023, Honduras registró 545.043 personas migrantes irregulares de casi un centenar de nacionalidades que cruzaron (el) territorio hondureño con destino al norte de América, principalmente a los Estados Unidos», subraya el informe del Conadeh.
Además, indica que el flujo masivo de migrantes en 2023 «no solo rebasó las capacidades de las instituciones que atienden a este sector vulnerable, sino que dejó una estela de denuncias de violaciones a los derechos humanos, así como abusos cometidos por personas particulares y autoridades hondureñas».
La titular del Conadeh, Blanca Izaguirre, condenó los abusos contra los migrantes y recordó la obligación que tiene el Estado de Honduras de respetar y proteger la dignidad humana y los derechos humanos de las personas que transitan por el país.
