La Corte Suprema de los Estados Unidos ha confirmado una decisión judicial que permite a los acreedores de Venezuela embargar Citgo, la refinería petrolera filial de Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA), ubicada en Houston.
El juez estadounidense Leonard Stark ha otorgado a un conjunto de acreedores asociados a Venezuela el permiso para participar y obtener beneficios de una futura subasta de acciones de Citgo Petroleum. Esta resolución surge tras una demanda presentada por la empresa minera canadiense Crystallex Corp, que estableció formalmente una conexión entre Citgo y las deudas de Venezuela.
La resolución aún exige que el conjunto, formado por 10 empresas, respete la fecha límite del 12 de enero para emitir órdenes de embargo contra las acciones de PDV Holding, la empresa matriz de Citgo. Las empresas han buscado participar de manera integral en caso de que Crystallex y ConocoPhillips, los dos acreedores más grandes, lleguen a acuerdos con Venezuela.
La justicia estadounidense ha rechazado un intento de Venezuela de limitar la cantidad de empresas que podrían participar en la subasta. Esta resolución abre una oportunidad para que cualquier acreedor adicional obtenga una parte de las ganancias de la subasta.
El magistrado ha dado prioridad a las reclamaciones de Crystallex y Conoco, valoradas en 970 millones de dólares y casi 10 mil millones de dólares respectivamente. Si se les paga en su totalidad, podría dejar poco para los demás. Los tenedores de bonos que buscan alrededor de 1.900 millones de dólares están demandando a Venezuela en un caso separado y han expresado su preocupación de que podrían quedar excluidos de las ganancias.