En el inicio de la Asamblea Ordinaria Anual, la Conferencia Episcopal Venezolana hizo un llamado a buscar una solución pacífica y concertada que priorice las exigencias de la población venezolana.
La Asamblea Episcopal que se realiza del 7 al 12 de enero en Caracas, tiene las características propias de revisión, de lo que se ha hecho y de proyección, lo que la Iglesia debe hacer en el futuro, explicó el Cardenal Baltazar Porras, Arzobispo de Caracas.
«Bueno, indudablemente es la búsqueda de una solución que tiene que ser pacífica y que tiene que ser concertada. No puede ser el que se quiere imponer ningún sector sobre el otro, sino que tenemos que poner por delante las expectativas de la población venezolana», respondió el Cardenal sobre las acciones de la Conferencia Episcopal Venezolana con relación al proceso político venezolano.
Porras señaló que el año que inicia es “muy especial en la vida de Venezuela”, dado que es un año electoral y tiene una serie de expectativas, que según el ministro deben realizarse “pensando en el bien, en la pobreza y en los muchos problemas que tiene la población”, destacó.
El Arzobispo apuntó que la Iglesia seguirá trabajando en la búsqueda de una solución pacífica y concertada que busque el bien de la comunidad, de los más pobres y desasistidos.
Ratificó su exigencia de que se garantice en Venezuela las garantías electorales para que ocurra una serie de cambios que hacen falta, “una búsqueda que produzca el progreso, no solamente material, sino sobre todo anímico y espiritual”, señaló.