El deterioro de los precios del café y la caída del consumo en alrededor de un 50%, ha incidido en que en estos momentos el 80% del café que se esté produciendo en Venezuela, no cumple con los estándares de calidad para la exportación, asegura Pedro Vicente Pérez, director Ejecutivo de la Confederación de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedeagro).
Afirma que la ausencia de una política integral para la caficultura nacional, ha contribuido a que en las últimas décadas, la producción de café haya venido declinando progresivamente y se ha pasado de producir 1 millón 850 mil quintales, hace algunos años a solo 400 mil quintales.
Para garantizar la calidad final del café procesado, es necesario recoger el café maduro que era el sistema que antes utilizaban los caficultores y que permitió producir durante 60 años un café de primera calidad; luego se comenzó a cosechar el café verde y al mezclarlo comenzó a deteriorarse la calidad, situación que se comenzó a presentar durante el segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez, lo que quiere decir que tenemos 40 años de deterioro progresivo de la calidad del café por distintos factores como la falta de insumos, de maquinarias, de nuevas tecnologías, de financiamiento y de precios rentables.
Revela que el Gobierno fijó a través de la Gaceta Oficial, una disposición en la que estableció que el quintal de café a nivel productor se fijaba en 190 $; sin embargo, la agroindustria solamente les está pagando a 120 $/quintal , lo que ha contribuido a que muchos caficultores hayan dejado este cultivo.
Asimismo, entre los caficultores y la agroindustria aparece la figura de los intermediarios, quienes se presentan como asociaciones; sin embargo, no son más que sociedades anónimas, distintas a las asociaciones de caficultores que son sin fines de lucro, que se dedican a comprar el café barato, aprovechando las necesidades de los productores, para luego venderlo a la agroindustria.
Mientras tanto, el kilo de café se lo pagan al productor a 3,5$, la agroindustria una vez procesado le pone en un precio de 8,5$/kg y en el anaquel de los supermercados se vende entre 12$ y 14$/kg precios que estuvieron vigentes en el 2023; sin embargo, con la caída del consumo nacional en alrededor de un 50%, se han producido ajustes hacia la baja en la cadena de comercialización y en estos momentos el kilogramo de café a nivel del consumidor se puede adquirir entre 9$ y 10$/Kg.