El ejército israelí indicó este domingo que había completado las grandes operaciones de combate en el norte de Gaza y terminado de desmantelar la infraestructura militar de Hamás en la zona, cuando la guerra contra el grupo armado cumplía tres meses.
El ejército no mencionó los despliegues de tropas en el norte de Gaza de cara al futuro. Su vocero, el contralmirante Daniel Hagari, dijo el sábado por la noche que las fuerzas seguirían “ahondando en lo conseguido” allí, reforzarían las defensas a lo largo de la cerca entre Israel y Gaza y se centrarían en las zonas centrales y sureñas del territorio.
El anuncio se hizo antes de la visita a Israel del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken. Miembros del gobierno de Joe Biden, incluido Blinken, han reiterado a Israel que reduzca su dura campaña aérea y terrestre en Gaza y pase a ataques más dirigidos contra los líderes de Hamás para evitar daños a civiles palestinos.
En las últimas semanas, Israel ya había ido reduciendo su operación militar en el norte de Gaza e intensificando su avance sobre el sur del territorio, donde la mayoría de los 2,3 millones de palestinos que viven en Gaza se ven recluidos en zonas cada vez más pequeñas en una catástrofe humanitaria bajo los bombardeos israelíes.
La guerra comenzó por el ataque de Hamás del 7 de octubre sobre el sur de Israel, en el que los milicianos mataron a unas 1.200 personas, la mayoría civiles, y capturaron a unas 250 personas.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, insistió de nuevo este domingo en que la guerra no terminará hasta alcanzar los objetivos de eliminar a Hamás, recuperar a los rehenes israelíes y garantizar que Gaza no será una amenaza para Israel.
“Digo esto tanto a nuestros enemigos como a nuestro amigo”, dijo al gobierno. “Esto es nuestra responsabilidad y es la obligación de todos nosotros”.