Trabajo de www.talcualdigital.com
El Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) determinó que el sacerdote proveniente de Kenia, Josiah K’Okal, se suicidó en una zona boscosa de Guara, estado Monagas.
El director del Cicpc, Douglas Rico, indicó que el presbítero dejó abandonado un pedazo de mecate en su residencia, la pieza era una fracción de la utilizada en el hecho.
«En relación a lo ocurrido con el sacerdote Okal Asa, se determinó a través de la criminalística que fue un suicidio. Luego del hallazgo del cuerpo sin vida del sacerdote Okal Josiah Asa en la carretera nacional Tucupita Barrancas, municipio Sotillo, estado Monagas, se inició el trabajo de investigación técnico – científico, que permite manejar como móvil del hecho un posible suicidio, ya que al momento de ser localizado en la residencia donde él habitaba, fue hallado un vínculo de un mecate que él utilizó para quitarse la vida», detalló.
Rico dijo que tras hacer la inspección al lugar y entrevistas a amigos y conocidos de la víctima, las autoridades descubrieron un «estado depresivo reciente», que se evidenció en las últimas conversaciones halladas en su teléfono.
“Al realizar la inspección técnica al sitio del hecho, se colectó otra parte del segmento de cuerda, por lo que se realizan las experticias y se determina que había continuidad del mismo”, expone.
El misionero desapareció el 1 de enero. Funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) encontraron el cuerpo del sacerdote, miembro de la Congregación Misioneros de la Consolata (con sede en Tucupita, Delta Amacuro), colgado en una zona boscosa en Guara, estado Monagas.
«Al sacerdote Josiah K’Okal, proveniente de Kenia, lo hallaron colgado de una soga en una zona boscosa cerca de un punto de control en las afueras de Tucupita. Según allegados, es poco probable que se trate de un suicidio. ¡Esperamos las pesquisas!», indicó en redes el periodista Óscar Schlenker.