¡Hola Diciembre!
¿Cómo le damos la despedida al mes de diciembre? ¿Cuál es la postura emocional que activas diariamente? ¿Cómo le abres la puerta al súper enero?
¡Si… es inevitable! Necesitamos hablar sobre las emociones en primer lugar, y para nuestra próxima sesión, ¡upfs! Quise decir, en la próxima columna… revisaremos otros temas emocionales relacionados con la comprensión emocional, toma de decisiones, entre muchos otros.
Comenzaré haciéndote varias preguntas, te sugiero que si tienes a mano lápiz y papel, escribas tus respuesta y… dejes registro de cómo te estas sintiendo. La idea es que, en otro momento, puedas convencerte que las emociones no son eternas, y que lo que HOY puedas estar sintiendo (miedo, rabia, tristeza, alegría o amor) mañana, o en OTRO DIA será un recuerdo pasajero.
Primera pregunta: El día de hoy ¿Cómo Estoy?
Para ello, es importantísimo que pienses en calma antes de responder, no te apures- ni afanes…
¡Mereces hacerlo a tu ritmo!
¿Qué son las emociones?
Las emociones son reacciones fisiológicas que experimenta una persona, y demuestran su capacidad individual de responder ante estímulos externos. Esta forma de reaccionar define la modalidad de adaptación que posee una persona ante situaciones de su entorno. Las emociones representan “la manera como” el individuo responde, acciona, siente y se expresa ante una situación específica.
¿Cuántas emociones existen?
Existen cinco emociones básicas que tienen la cualidad de ser “sentidas” por todas las personas, es decir son universales (miedo, alegría, rabia, tristeza y amor); vale destacar que a partir de estas emociones básicas, se amplía el espectro emocional inicial con otro repertorio emocional que se deriva de las primeras y, están tipificadas como: desagrado (asco), vergüenza, excitación, desprecio, orgullo, satisfacción, entre otras más.
Es importante destacar, que la intensidad emocional en cada persona responde a sus variantes socio-culturales y contextuales, por lo tanto te encontrarás seres que “reaccionan de manera diferente” ante una u otra situación específica; podrás observar, en consecuencia que no se generaliza, ni se emite la misma respuesta ante una buena noticia, un duelo o un desamor. Esto reafirma que cada cabeza es un mundo, que no tiene comparación (heeeee!!!!!) e implica de esta manera, que cada persona debe ser abordada según sus diferencias particulares e historias de vida.
Por ejemplo, dependiente de su lugar de origen, patrones de crianzas, modelamiento cultural, influencia de su entorno, entre diversas variables, se manifesta un repertorio conductual acompañado de una carga emocional tan diversa, que en ocasiones nos parece poco lógico, extremo o descabellado ¡pero NO!… eso fué lo que aprendió.
Psico- Tips:
Finalmente, las emociones pueden “hacer de ti” una persona positiva o tóxica; una persona exitosa o desastrosa.
Todo se centra en tu propia responsabilidad sobre este tema.
¡Ha… una buena noticia! Las emociones poseen la capacidad de aprenderse y desaprenderse, por lo tanto podemos:
- Aprender, a “sentirnos de mejor manera”
- Desaprender, lo que No ayuda a “sentirnos de mejor manera”
Dra. Cecira Briceño
Psicóloga-Sexóloga
@dracecipsicologa