Del comportamiento de la producción y del precio del petróleo, va a depender lo que ocurra en la economía venezolana en el 2024, una economía doméstica que está debilitada y el fisco restringido, asegura el Observatorio Venezolano de Finanzas, en su informe de fin de año al referirse a las expectativas para el año que viene.
Advierte el informe, que internamente no hay fuerzas que puedan relanzar el crecimiento, a lo que se suma la falta de financiamiento externo e interno. El mercado internacional de los hidrocarburos cierra 2023 con una clara tendencia a la baja de los precios, y de mantenerse esa situación, para Venezuela mayores ingresos por exportaciones dependen del volumen exportado, para lo cual es vital el mantenimiento o ampliación de las licencias otorgadas por el gobierno de EEUU.
Como parte de su portafolio de indicadores económicos, el OVF incluye inflación, el índice mensual de actividad económica, las remuneraciones y la dolarización de las transacciones. A eso hemos sumado la Encuesta de Expectativas Económicas, la cual incluirá la inflación, la actividad económica y el tipo de cambio.
Las encuestas de expectativas son realizadas para obtener información cuantitativa y cualitativa usada para monitorear la situación económica actual y obtener previsiones de corto y mediano plazo sobre la economía nacional. La encuesta más antigua sobre expectativas es la realizada por la Reserva Federal de Filadelfia a pronosticadores profesionales en Estados Unidos. Inició en 1968 por parte de la Asociación Americana de Estadística (ASA) y el National Bureau of Economic Research (NBER), y quedó a cargo de la Reserva Federal de Filadelfia en 1990.
El OVF estima que el tipo de cambio para el 2024 estará oscilando entre 62,0 Bs/$ y 86,0 Bs/$; mientras que la inflación tendrá una variación entre 150% y 210% y para la actividad económica proyectan un crecimiento entre 1,6% y 5,1%, estimaciones que se resumen en un moderado crecimiento económico y la persistencia de una inflación de tres dígitos.