Gracias al esfuerzo, trabajo e inversión de los propios productores, en el año que finaliza, se pudo lograr un incremento sustancial en el cultivo de maíz blanco en las zonas donde tradicionalmente se obtiene ese grano con mayor calidad.
Al ofrecer la información Lorenzo Monasterios, en su condición de miembro de la Comisión Agroalimentaria de la Asamblea Nacional del 2015, precisó que las áreas cultivadas sumaron 340.000 hectáreas, de las cuales 170.000 corresponden a Guárico y Portuguesa.
Aunque es una cifra importante y superior a la registrada el año anterior, todavía no ha sido posible igualar el nivel productivo del pasado cuando se lograban cultivar más de 350.000 hectáreas en zonas maiceras.
Lamentablemente, dijo, en el momento en que los productores con mucho sacrificio que hicieron para incrementar una producción de excelente calidad, el gobierno, sin medir las consecuencias para el sector agrícola, autorizó, como siempre ocurre por falta de verdadera política agrícola, la importación desmedida de maíz blanco.
Esa actitud incorrecta de los funcionarios gubernamentales causó desazón entre los productores, quienes con su esfuerzo habían logrado alcanzar un sustancial aumento en la productividad, ya que se obtuvieron los 4.000 kilos por hectárea.
Hay que resaltar este hecho y condenar la actitud desleal del gobierno de Nicolás Maduro, quien en vez de estimular y preservar la producción nacional, con el fin de favorecer los intereses de unos cuantos individuos afectos al régimen, autorizó las importaciones de un grano producido en el país.
Naturalmente, el mayor problema ocasionado a los productores fue que no pudieron vender las cosechas al precio conveniente y además los costos de producción fueron muy altos, porque en Venezuela ya no se producen, como antes, los insumos que requieren los agricultores para trabajar sin dificultad, manifestó Monasterios a El Impulso.