Desde hace mucho tiempo se venía hablando de las gestiones que estaba haciendo el gobierno de Nicolás Maduro con el de Joe Biden, de los Estados Unidos, por la cual no es ninguna novedad que haya sido liberado el empresario colombo-venezolano, porque lo importante es que hay conversaciones entre las autoridades de ambos países que aún no se conoce.
Coinciden en esta apreciación el doctor Rafael Simón Jiménez, exparlamentario, exrector del Consejo Nacional Electoral y analista político; y los expertos politólogos Pedro Benítez y Piero Trepicciones, entrevistados, separadamente, por El Impulso.
A los Estados Unidos ya no les interesaba Saab
El doctor Jiménez manifiesta que el gobierno de Maduro ha sido muy persistente en lograr la liberación de Saab, porque éste ha estado vinculado a los negocios oficiales de los Clap y de mercancías por cuyas irregularidades y lavado de dinero fue acusado penalmente en los Estados Unidos, luego de haber sido apresado en Cabo Verde, al aterrizar su avión por falta de combustible, el 12 de junio de 2020 y contra él existía orden internacional de arresto
Yo creo –dice el doctor Jiménez– que los Estados Unidos ya no tenían interés en mantener a Alex Saab detenido porque, posiblemente, ya le habían sacado la información que ellos requerían.
Una cosa que llama la atención es que en los Estados Unidos son gravísimas las acusaciones de narcotráfico y crímen organizado, pero él no aparecía señalado por ninguno de esos delitos, sino por lavado de activos, asociado al gobierno venezolano y el asunto de las sanciones. Es evidente que el gobierno venezolano puso mayor interés en su liberación, y el gobierno estadounidense accedió a esa solicitud porque está pendiente el asunto de los presos políticos. Se dice que saldrán en libertad 36 personas, entre las cuales estaría Roberto Abdul, de Súmate y serían beneficiadas las otras vinculadas a María Corina Machado, acusadas de traición a la patria y otros hechos.
En todo caso, el tema de Alex Saab no tiene ninguna novedad, añade. Hay que recordar que no hace mucho tiempo se produjo un canje por los sobrinos de Cilia Flores, quienes fueron acusados por narcotráfico. Lo que pasa es que en Venezuela son impresionantes las noticias que se recuerdan unas y se olvidan otras. Eran más graves las acusaciones contra los sobrinos de Cilia Flores que contra Alex Saab porque ellos, prácticamente, fueron agarrados con las manos en la masa por la DEA.
Creo que hay que esperar que lo de Saab se clarifique porque detrás de eso hay un compromiso del gobierno venezolano tanto de soltar presos políticos como el cumplimiento del Acuerdo de Barbados.
El gobierno está tratando de hacer como un paquete para que queden complacidos los familiares de los presos venezolanos; y los Estados Unidos, para que sean liberados sus nacionales.
Aunque se haya dado esa liberación, todavía queda mucho en el misterio y tenemos que esperar que las cosas se esclarezcan en los próximos días y en los meses venideros.
¿Qué podría esperarse?
Aún no sabemos. He oído decir que Saab sería extraditado a Colombia, donde hace ya mucho tiempo está siendo requerido.
¿Será posible?
Quién sabe, pero como el gobierno venezolano tiene estrecha amistad con el de Colombia, es posible. Pero, en los que nos ocupa a nosotros, los venezolanos, lo que se debe evitar es que se caiga en la trampa de ratones, que es la de que sueltan a unos presos políticos y agarran a otros. Y la situación queda en el mismo punto. Pero, ojalá, no ocurra eso, sino que prevalezca el espíritu de Barbados, para que haya un clima político que sirva de fundamento a unas elecciones libres el venidero año.
Acuerdo no escrito
Al ser entrevistado el doctor Pedro Benítez, historiador y politólogo, dijo que mientras en los Estados Unidos era liberado Saab, en nuestro país se le abrían las puertas de la cárcel a seis sindicalistas.
Se refería a Alcides Bracho, Alonso Meléndez, Emilio Negrín Gabriel Blanco, Néstor Astudillo y Reynaldo Cortés, quienes entre el 4 y el 7 de julio del año pasado fueron detenidos y en agosto de este año fueron condenados a 16 años de cárcel, acusados por conspiración y asociación para delinquir.
Esos sindicalistas –manifestó– estaban pidiendo mejores salarios, pero como respuesta fue meterlos presos. Me alegra mucho por ellos.
Seguidamente se refirió a los estadounidenses liberados y comentó que la política de los países es defender a sus ciudadanos, donde quiera que estén. Me parece lógico. Antes que nada ellos van a pensar en los intereses de su país y el de sus ciudadanos, que es lo que corresponde.
Al ser inquirido sobre la liberación de Alex Saab, acotó:
Eso es muy común y ha ocurrido varias veces, a lo largo de muchos años. Estados Unidos con otros gobiernos, que tienen las características distintas al venezolano, que no es democrático y no tiene Estado de Derecho, hace ese tipo de negociaciones en función de sus propios intereses.
Pero, en el caso de Venezuela, Saab era un punto importante.
Lo entregan por estas personas. Forma parte de un proceso que hemos venido viendo hace varios meses. Un capítulo fueron las conversaciones que dieron el acuerdo de Barbados, pero detrás de eso hay otro acuerdo no escrito entre la administración Biden y el gobierno de Maduro.
El doctor Benítez indica que desde marzo del año pasado se vienen desarrollando ese proceso, el cual ha pasado por el levantamiento de las sanciones y que probablemente lleve a la normalización de las relaciones entre los dos países.
Es un proceso –reitera– que está en desarrollo.
¿Quedan muchas expectativas?
Apenas está empezando.
¿Cree usted que, dentro de ese proceso, en Venezuela haya elecciones justas, competitivas y sin el acostumbrado ventajismo?
Los venezolanos tenemos que prepararnos para la normalización de las relaciones entre los Estados Unidos y Venezuela. Estados Unidos y ninguna otra nación podrá hacer por los venezolanos, lo que a nosotros nos cuesta hacer por nosotros mismos. En ese sentido, los venezolanos que queremos un cambio para el país tenemos que organizarnos en todo el territorio nacional e ir a la elección presidencial y ganarlas, en las condiciones que sean. Prepararnos para lo peor, para conseguir lo mejor.
Una negociación diferente
Piero Trepiccione expone que lo que está ocurriendo con las liberaciones de una y otra parte, es producto de una negociación muy particular y muy diferente a los procesos anteriores de negociación.
Porque aquí el peso fundamental de esta negociación es absolutamente bilateral; es decir, ese peso lo llevan la administración Biden y el gobierno de Maduro.
Hemos estado viendo algunos anuncios de carácter económico, especialmente en materia de acuerdos para reactivar la explotación petrolera y gasífera, no solo con empresas estadounidenses sino también con europeas; pero, lo más importante es lo que no se ha publicado.
Lo más importante es lo que se viene discutiendo tras bastidores, y eso ha hecho que se debe esperar resultados para las próximas semanas. Es difícil decir en términos de balance de quién gana y quién pierde.
Los resultados en términos de negociación van a tener mucho que ver con el próximo año, con la elección presidencial en Venezuela y cuáles son los mecanismos que se van a aplicar para, justamente, regular el proceso de campaña y, además, el propio día de la elección presidencial.
¿Eso quiere decir que la liberación de Alex Saab, por una parte, y la de sindicalistas y presos políticos, aún no evidencian resultados definitivos para el país?
–Hay que tomar en cuenta que se están produciendo rumores e informaciones imprecisas, producidos por los propios autores o afectar la marcha de esta negociación. Hay que tener mucha cautelares y recordar que cuando el río suena, piedras trae.
