Un vehículo que pretendía entrar en Estados Unidos desde Canadá explotó este miércoles en el puente Rainbow, sobre el río Niágara, provocando la muerte de dos personas y heridas leves a un agente fronterizo. El incidente, cuyas causas se desconocen, ha obligado al cierre temporal de ese paso y de otros tres que conectan el estado de Nueva York con la provincia de Ontario.
Según el periódico local Niagara Gazette, el carro explotó cuando se acercaba al puesto de control estadounidense, situado en la ciudad de Buffalo. La cadena ABC también informó de que había “múltiples víctimas”, sin dar más detalles. Se ignora si la explosión fue intencionada o accidental, así como la identidad y la nacionalidad de los ocupantes del vehículo.
El puente Rainbow, que une las ciudades de Niagara Falls (EE.UU.) y Niagara Falls (Canadá), se encuentra ahora cerrado en ambos sentidos, precisamente en una fecha (mañana es Acción de Gracias) de gran movimiento de vehículos. Los otros tres puentes que cruzan el río Niágara, Lewiston, Whirlpool y Peace Bridge, también se cerraron tras el incidente, aunque algunos ya han reabierto.
El ministro de Seguridad Pública de Canadá, Dominic LeBlanc, calificó el incidente como “muy grave” y dijo que estaba en contacto con sus homólogos estadounidenses para obtener más información. Por su parte, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, afirmó que había sido informada del suceso y que estaba “siguiendo de cerca la situación”. Añadió que la policía del estado trabajaba con el FBI para monitorear todos los puntos de entrada a Nueva York.
Fotos y vídeos tomados por organizaciones de noticias y publicados en las redes sociales mostraban una cabina de seguridad chamuscada por las llamas, sin que se tenga información de lo ocurrido. El primer ministro de Ontario, Doug Ford, declaró que sus fuerzas policiales estaban evaluando activamente la situación y que estaban trabajando con las fuerzas del orden locales. Hasta el momento, no hay una reacción oficial del gobierno estadounidense.