Trabajo de: www.runrun.es
El Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE), del Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), reveló un deterioro en términos económicos y sociales con una caída del 2,4 % en los primeros nueve meses de 2023 con respecto al mismo período del año 2022.
De acuerdo con el IMAE, se revirtió el comportamiento de la actividad económica para este 2023, comparado con 2022, donde se registró un aumento de 14,8 %.
Sin embargo, el texto destacó que durante el tercer trimestre del año en curso, la economía de Venezuela salió de la recesión que se inició en el primer trimestre de 2023.
El IMAE es un indicador que se realiza tomando en cuenta la ausencia de datos oficiales por parte del Banco Central de Venezuela, Instituto Nacional de Estadística y Petróleos de Venezuela, en producción industrial, ventas del comercio y la extracción petrolera para lo cual se recurre en este último caso a las cifras Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Según el IMAE, el factor predominante que explicó el crecimiento de la economía en 2022 fue la importante expansión de la producción petrolera en 25 % al pasar de 535.000 barriles diarios en enero-septiembre de 2021 a 667.000 barriles diarios en enero-septiembre de 2022, «con los efectos encadenantes en la demanda de bienes y servicios que requiere la extracción de hidrocarburos».
Sin embargo, añadió el indicador, la economía se desenvolvió en un ambiente en el cual «la restricción crediticia siguió privando como elemento limitante del crecimiento, aunado a las deficiencias de servicios tales como la electricidad y la falta de combustibles para la movilización de la carga, entre otros elementos».
En lo que corresponde al tercer trimestre de 2023, en el gráfico siguiente se observa la trayectoria del IMAE a lo largo de 2022 y 2023:
Recaudación del IVA
A lo largo del tercer trimestre de 2023 los principales componentes del IMAE, que realiza el OVF, mostraron mejoras, como la producción petrolera, el crédito bancario y de manera considerable el gasto fiscal en tanto que la recaudación del IVA en términos reales «experimentó una modesta disminución».
El IVA, explica el IMAE, se usa en el indicador como una variable sucedánea del consumo privado en tanto que el gasto fiscal se aproxima por los movimientos de la cuenta de la Tesorería Nacional mantenida en el BCV.
En ese sentido, añadió el texto, el comportamiento de la recaudación del IVA presenta una «aparente contradicción con la mayor expansión fiscal y con el hecho que las remuneraciones reales del sector privado aumentaron durante el tercer trimestre de 2023 aunque las del sector público cayeron de manera significativa».
Inflación y canasta alimentaria
De acuerdo con las cifras de octubre de 2023, la tasa de inflación anualizada se situó en 362 %, mayor a la observada en el mismo lapso de 2022 (173 %).
Esta aceleración de la inflación, explica el IMAE, ha ocurrido en un entorno en el cual «el tipo de cambio nominal registró una mayor depreciación anualizada en octubre de 2023 (310 %), respecto al mismo mes de 2022 (96 %)«.
Lo anterior sugiere, según el IMAE, que ha ocurrido «una apreciación del tipo de cambio real por cuanto los niveles de inflación interna exceden con creces al ajuste que experimentó el tipo de cambio, con sus impactos adversos sobre la competitividad de la economía y las cuentas fiscales».
Por otra parte, señala el IMAE que aunque los precios de los alimentos reflejaron un aumento considerable durante los primeros nueve meses de 2023 respecto a similar lapso de 2022, el mayor incremento se ha observado en los servicios.
«La política de procurar estabilizar el tipo de cambio para atemperar la inflación, se ha reflejado en una pérdida de reservas internacionales por parte del BCV no obstante el mayor flujo de ingresos de difusas como resultado del aumento del valor las exportaciones petroleras, tal como se aprecia seguidamente», añade.
Finalmente, el valor de la canasta alimentaria que mide el OVF ha vendido mostrando «una clara tendencia alcista», lo cual ha implicado según la estructura de remuneraciones del sector púbico que una fracción ínfima pudo cubrir el costo de esa canasta en octubre, la cual se cifró en US$ 379, excluyendo así a la gran mayoría de los trabajadores de Venezuela.
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