#OPINIÓN Roxana traiciona a Julio, luego al nepotismo de Lozada #1Nov

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En la administración pública,
el nepotismo es un fenómeno cuestionable.
Crisanto Gregorio León

El nepotismo.- Si de algo se cuidó Julio Vásquez, fue de no contratar a ninguno de sus familiares para trabajar en la institución. Un asunto de moral en el desempeño funcionarial debe alejar a las autoridades de los organismos de la proclividad de hacer de las instituciones del estado sus haciendas familiares o particulares. Al eludir ese vicio, se fortalecería la honestidad, la idoneidad y la eficiencia en la gestión pública y con ello, la mejor garantía del interés general. Piensa Lozada que este es el momento estelar de tu carrera. No cometas errores, hazlo bien, decente y correcto. Recuerda la advertencia del Santo Cura de Ars. “Ten cuidado en tus mejores momentos. Es cuando el diablo viene por ti”. Cuando nos encontramos disfrutando de nuestros momentos estelares, debemos cuidarnos de no caer en las tentaciones y no ser presa fácil de la jactancia y de la prepotencia creyéndonos impunes de nuestros exabruptos y que los demás deben calarse nuestro peor rostro. No basta con darle misas a la plebe, si no comulgas con Cristo.

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Cebados para la corrupción.- Lo más lamentable y deplorable es que Julio instaló la urgencia y la necesidad de corrupción en las mentes de los clientes internos y en los usuarios; salivando como los perros de Pávlov, pero en este caso de hambre de criminalidad de bajo perfil, camuflados de decentes. Por lo que caras vemos delincuentes no sabemos. ¡Que legado tan podrido el dejado por Julio Séptimo Vásquez Masquer, el coronel psicópata!. Recordemos el condicionamiento clásico: Ivan Pavlov descubrió que podía condicionar a los perros para que saliven ante estímulos que no estaban directamente relacionados con la comida, como el sonido de una campana. Para llevar a cabo sus experimentos, Pavlov colocaba a los perros en un recinto experimental y les administraba comida después de tocar una campana. Tal cual para la corrupción según el condicionamiento clásico desarrollaron las conductas impías los monos voladores jalabolas del coronel psicópata. Pero en estos estadios de la cronicidad de la corrupción institucional, lo que está instalado en los funcionarios delincuentes, es un condicionamiento operante tal como lo describiera Skinner, porque no logran los truhanes internos y externos contenerse de los vicios que los caracteriza y ellos mismos emiten la conducta corrupta, asociando su comportamiento a la consecuencia deseada – llenarse de muchísimos dólares los bolsillos a cualquier costo – . Los estímulos proceden de dentro de ellos mismos, porque ya saben lo que tienen que hacer para preñarse de dinero sucio y lleno de sangre. Ya saben lo que tienen que hacer para enriquecerse criminalmente. Ninguno de ellos es inocente, ninguno de ellos se chupa el dedo.

La naturaleza traicionera de la hibristofílica. Roxana es una mujer sin principios, cuyo único interés es su propio beneficio. Cuando se vio la soga al cuello en la gestión de Julio Séptimo Vásquez Masquer, optó por fingir inocencia, además de complotarse en contra de su jefe y formar parte de los conjurados que lo traicionaron para salvarse ella. Un asunto de faldas y más allá. La filosofía de Roxana se recoge como “En las puertas del cielo, primero yo que mi padre” y esto marca un actuar para ella. Yo soy prioridad frente a la necesidad del otro. Ella es Roxana, porque tenemos certeza de que no la conoces. Estamos enterados Lozada, que Roxana se ha presentado como una mansa oveja, arguyendo que todas las perversiones que hizo en la gestión anterior, se debieron a la presión y al acoso de que fue objeto por parte de Julio. O sea, que ella blande la eximente conveniente de que Julio la obligaba a delinquir. Y a ti te ha agradado su fingida sinceridad. Es que ella te ve con cara de poceta. Porque al parecer tal cual expone la “sss”, te gusta tener perversos al costado. El asunto es que Roxana no ha hecho nada presionada que no sea todo lo que le fluye, le deviene, le deriva y le es connatural a su personalidad encapuchada y tú te has estado dando cuenta de ello por las atrevidas sugerencias y decisiones que te hace creer muy hábilmente que son tuyas y son decisiones de ella. Pero tú crees que son tuyas, por la similitud de la elaborada maquinación. ¡Ella es la que manda!. Roxana se siente empoderada, hace alarde de la posición que ostenta y conserva, la que ha escalado por la facilidad con que las palabras de su lengua bífida son ecos en los oídos crédulos de Lozada y de quien no la conozca. Por otra parte, la gente cree lo que quiere y le conviene creer, pero no cree o elude lo que no le interesa creer. En una gestión caracterizada por el nepotismo, es preferible creer en lo que nos dice o sugiere el sobrino, que lo que el sentido común nos revela. Recordemos que la etimología del vocablo nepotismo, es precisamente nepote o “sobrino”. En el análisis psicológico de las grandes traiciones encontraréis siempre la mentecatez de Judas Iscariote. (Antonio Machado). El asunto es neo Lozada, que además de tus propias sierpes, Julio Vásquez dejó instalado en la institución su peculiar serpentario y tú lo estás alimentando. En el terrario institucional, Roxana es la reptil más destacada.

Desde el bajo escondrijo de su indecencia.- Roxana la Sierpe, pregona con su moral de bota ancha, que ella y su hermana la Boa, junto a Macu la cauchera, manipulan a Lozada. Chismorrean entre ellas que a Lozada se lo meten en el bolsillo. Por lo que la corrupción continúa envolvente como sonido “surround sound”. Y en efecto es vox populi en la institución que estas tres mujeres han logrado la genuflexión y la sumisión de Lozada, a tal punto que éste les rinde pleitesía. Las féminas describen que el “cuatriboliao”, es un mandilón de ellas, que se porta cual títere sugestionable por las narrativas de la astucia y el ingenio manipulador de estas dominatrices que vienen de la escuela de Julio Séptimo Vásquez Masquer. Luego del trastabilleo de aquella noche en la que Lozada se hizo presente y Roxana estaba meándose con un ataque de pánico ante su “incierto destino” y Macu la cauchera vociferaba que había “gato encerrado”, porque ante el curso de los acontecimientos decidieron fingir que las tomó por sorpresa, a la vez de unirse teatralmente a los atónitos pero alegres espectadores en aquella tarde de la serranía donde estridulaban los grillos machos y la gente honesta se esperanzó en que todo iba a cambiar.

El nivel de poder.- Porque las sierpes de Julio, han detectado las debilidades de Lozada. Han estudiado al jefe y han encontrado las rendijas por donde colárseles de tal manera que él no se entere que está siendo manipulado, ni que la información “sumarial” que manejan en directorio o con ellas a solas, está saliendo a la luz pública, siendo indiferente el acompañamiento que tiene del asistente virtual. Según Roxana, el sustituto Lozada ha hecho imperar en la institución una suerte de nepotismo, otorgando cargos a sus familiares, sobrinos y peculiares amiguetes. La familia de Lozada está instalada en la institución, siendo esto una indeleble característica del nepotismo de su gestión. Así, todas las ganancias ilícitas proyectadas de esta “mina de oro” se quedan en “casa de Lozada”. Según la lectura de Roxana, lo que está haciendo Lozada es instalar en la institución su propia banda de extorsión, falsificación de títulos valores u otros crímenes, y de conformidad con la proyección que está haciendo el advenedizo, resulta que el hampón Julio Séptimo Vásquez Masquer se quedaría en pañales al comparársele con esta ambiciosa gestión. Lozada le galantea a los modos criminales de operar de Julio Vásquez el psicópata; al punto de convivir en armonía alcahueta con los monos voladores de aquel. Así que luego de una extensa conversación a puerta cerrada entre Lozada y su homólogo Leo Malaparte, resulta que han dejado a Chuchín como mayordomo de las tres gestiones. Chuchín el amante masculino de Julio, su suplemento narcisista secundario; está coronado por haber demostrado su habilidad para robar, apropiarse, desmantelar, trampear, por la comisión de peculado, la destrucción y el saqueo sistemático de los bienes de la institución, con la coautoría de Harry Larvado el esclavo espía Stephen Candie del amo Julio. La gestión de Lozada ha de caracterizarse entre otras peculiaridades por el ejercicio despótico y el nepotismo del poder. Son los familiares y amigos de Lozada, los que han tomado las riendas del negocio de extorsión y venta de títulos valores estafa, por las delaciones que ha hecho Roxana en el bajo escondrijo de su indecencia. Mientras tanto y con la mirada y actitud celestina de Lozada, paralelamente operan las huestes del psicópata Julio Vásquez.

Quien hoy te compra con adulación, mañana te venderá con su traición. Roxana hace contrainteligencia en la institución. Pero es para ella resguardar sus espaldas en el negocio que tiene montado, además de la venta de cargos. A ella le resbala que Lozada sea curso de “el relojero” su jefe en el Distrito. Roxana utilizará a Lozada mientras no constituya para ella una amenaza. A esta fémina la caracteriza una egolatría narcisista con la que chapoteaba a merced y a gusto con Julio Vásquez, hasta que el psicópata atisbó que Roxana no le es fiel a nadie sino a ella misma. Pero tal como lo aseveró en alguna ocasión Chabela la amante femenina y suplemento narcisista primario de Julio Vásquez. De Roxana hay que cuidarse porque lentamente, se introduce con malicia y logra lo que le viene en ganas haciendo creer a los demás que fueron sus decisiones, mientras que se trata de semillas que ella planta y deja germinar en las mentes de otros para luego aniquilarlos. Roxana se aproxima fingiendo amistad para recabar información de la propia víctima y luego se complace observando como la destruye. Tal como ha dicho Franco, un jurista amigo que trabaja allí. Roxana ha de morir con una enfermedad terminal y tendrá que dar cuentas a Dios de su teatralizado cristianismo en su falsedad para cazar inocentes. Porque es tan cruel la maldad de Roxana, que no podrá salvarse del infierno.

Con las caras de Jano.- Recordarán de la mitología romana al Dios Jano, aquel que poseía dos caras, con una miraba hacia delante y con la otra miraba hacia atrás. Tal previsión es medularmente útil, como actitud ante la vida, en la que tener una visión plenaria del pasado debe constituir estrategia para la proyección futura, donde bajo el conocimiento de los errores pretéritos podamos estrangular gestaciones dolorosas para evitar tautologías que hagan pervivir aquello que nos impida un camino llano y seguro. Es saludable acordarse de los antecedentes para no ser sorprendidos en nuestra buena fe con lo que pareciera ser una inédita conducta, pues no se engaña a quien se sabe engañado y entre conjuras elitistas es bueno conocer los perfiles de los conjurados. El hetairismo de los valores nos hace rememorar los privilegios consagrados en el código de Hammurabi para este oficio. Los cultos licenciosos practicados por las “esclavas sagradas” en Grecia, e incluso el aprecio que se le daba a las cortesanas en el renacimiento italiano. Este antecedente, cuyos orígenes se remontan hasta el alba misma de la historia, nos hace comprender la particular influencia de las mancebas en la historia, donde muchas decisiones se supeditan o supeditaban a las promesas dadas bajo los lienzos de la pasión y los destinos eran sometidos a la merced de las veleidades de un capricho malsano.

También un carismático hebreo, por cierto Nazareno cuya fuerza era atribuida a su larga cabellera y cuyas hazañas se narran en el libro de los Jueces (capítulo 13-16), del Antiguo Testamento, fue traicionado por su amante Dalila, perdiendo su vigor y su vida, todo al cortarse el origen de su fuerza sólo por complacerla, no obstante la destrucción de los Filisteos. En el siglo pasado, la tristemente célebre cortesana, de origen holandés, Margaretha Geertruida Zelle, quien era conocida como Mata Hary, fue ejecutada mediante fusilamiento por los franceses en 1917 por espionaje a favor de Alemania. Por lo que constituyendo la historia un ciclo en el que los acontecimientos se repiten en escenarios distintos y con distintos actores, y en el que la naturaleza humana, salvo una formación y transformación muy profunda del hombre, no hace sino responder a elementos materiales, más no espirituales; la mirada hacia delante no puede abstraerse de la estela dejada por el pasado,

Con la certeza de un tiro al piso.- Sabiendo que Roxana traicionó a Julio, nada te garantiza a ti Lozada que no te ha de traicionar. Además ella también tiene instalada a su familia en la institución, ejerciendo ambos – tú y ella – nepotismo en la empresa. La ventaja que tiene sobre ti es que conoce a todo el personal o cree conocerlo y es una chismosa profesional. Roxana, se paga y se da el vuelto. Por otra parte recuerda Lozada, que por tratarse de un cargo público, de ejercicio público, sobre ti se hace y se hará contraloría social, porque todos los ojos están sobre ti, a ver si haces una gestión virtuosa o si tu desempeño será una catapulta de las invirtudes de Julio Masquer. Nos negamos a creer en las aseveraciones de Roxana, que tu gestión es más de lo mismo y que solo estás aprovechando el turno para enriquecerte de dinero negro y de dólares que no declararás ni a las contralorías ni al fisco. Sería un gran galardón para tu historia personal, luchar para ser recordado como el único jefe cuya gestión fue virtuosa en la institución. Porque puedes remendar el capote, cuando ya todos saben por boca de Roxana, que de dónde vienes te expulsaron por actos de corrupción. Es que ya ella te visitó. Sería honroso para ti cambiar la imagen. Y como advertimos sobre la terquedad del hombre que no da su brazo a torcer, solo aguarda la sostenida traición de Roxana.

La bulla de los cocíos.- Intereses inconfesables después de la bulla de los cocíos, hicieron inminente el recule de Roxana con Julio Vásquez el psicópata. Mayores son las ganancias que les dejan el cese al fuego, que mantenerse beligerantes, cuando ambos tienen mucho que perder y comparten anecdotarios de corrupción. Los intereses del GEDO, están por encima de ellos.

¿Entonces quién es el jefe en la institución? .- No tiene sentido Lozada, ser jefe solo de nombre si es Julio quien permanece mandando a distancia. Así lo dijo el General Bolívar, en una carta dirigida al General José Antonio Páez “Ser nombrado Jefe para no ejercer el mando es el colmo de la miseria”. Es un dislate dejar instalada en la institución a la tropa oscura de monos voladores jalabolas de Julio Séptimo Vásquez Masquer, especialmente a Chuchín, a Macu y a Roxana. Pero también a El-la, y peor aún a And la Reina… .son tantos que apestan. Todos ellos tienen el control….son los troyanos de Julio Séptimo.

El nepotismo atenta contra los principios de honestidad, participación, celeridad, eficacia, eficiencia, transparencia, rendición de cuentas y responsabilidad en el ejercicio de la función pública.
Crisanto Gregorio León

Crisanto Gregorio León
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