Desde el momento en que cristalizó la idea en la sociedad democrática de efectuar la Primaria, para que la verdadera oposición escogiera la candidatura única y unitaria para las próximas elecciones presidenciales, el régimen buscó las distintas formas de que el proceso fracasara; pero, se equivocó y los resultados de las elecciones del pasado domingo 22 de octubre, evidentemente, lo han dejado en un enorme atolladero, del cual no puede salir.
Así lo declara Simón Yústiz, exdiputado de la Asamblea Nacional y quien fue el presidente de Encuentro Ciudadano en Iribarren durante la campaña de Delsa Solórzano.
Al comentar esta situación, que se ha presentado al conocerse las proyecciones de los resultados del proceso, el mismo domingo 22 de octubre, Yústiz dice que quienes conforman la estructura del régimen se encuentran preocupados, angustiados y temerosos de que ahora sí pueden perder las elecciones porque ven que la población ha tomado plena conciencia de su rol protagónico y puede decidir quién debe ser su representante legítimo en unas elecciones presidenciales, por cuanto ya no es asunto de consenso de dirigentes políticos o acuerdo de partidos.
Ese 92 por ciento de electores que se inclinó por María Corina Machado ha tenido tan fuerte impacto como un terremoto de votos que ha sacudido al régimen.
Éste está tambaleando, no por supuestas amenazas del exterior, ni posibles golpes de estado o cualquier otro hecho sobrevenido, sino porque ya el pueblo lo rechaza masiva y públicamente, pues quiere que haya un cambio total, por cuanto el llamado socialismo del siglo 21 ha hundido a Venezuela en el más grande atraso económico, ha sumido a la población en la pobreza extrema y en la miseria al punto de que se han ido del país unos ocho millones de personas en busca de trabajo porque éste ya no existe porque tampoco hay empresas que estén funcionando exitosamente como antes, los salarios son de hambre y las pensiones de miseria.
El régimen se habían fijado como meta permanecer eternamente en el poder, cometiendo todas las arbitrariedades, violaciones a la Constitución y crímenes de lesa humanidad que investiga la Corte Penal Internacional, sin pensar un solo instante en las carencias, el malestar, sufrimiento, tormentos, aflicciones y dolor que padece el pueblo.
Los funcionarios de todos los niveles y sobre todo los del aparato que controla los poderes públicos, no tienen sensibilidad social, carecen de vocación de servicio, de espíritu cívico y condiciones morales, éticas y democráticas, porque son arbitrarios, inhumanos, déspotas, demagogos, mentirosos y engañadores.
El domingo 22 el pueblo que votó, así como el que no pudo hacerlo porque faltaron papeletas de votación, se hizo sentir. Conviene reconocer que la Comisión Nacional de Primaria en una actitud muy seria, responsable y honesta, se ajustó al número de papeletas que había establecido porque los estudios hechos indicaban que en una votación de este tipo, normalmente, la asistencia de electores oscila entre el 8 y el 10 por ciento del padrón electoral. Sin embargo, en esta oportunidad fueron rebasadas las estimaciones no sólo del organismo que organizó el proceso, sino de las propias encuestadoras y analistas políticos. Más de dos millones de personas, incluyendo enfermos y discapacitados,se hicieron presentes, soportando sol inclemente y en algunas partes lluvia, y decidieron con plena conciencia.
La mayor equivocación del régimen fue subestimar la Primaria, porque creyó que no votarían más de doscientas o trescientas mil personas. Y para ello desplegó una intensa campaña mediática, a través de la propia televisora del Estado, repitiendo constantemente que no habría Primaria, burlándose de los aspirantes, descalificando el proceso y desanimando a los potenciales electores.
Además, impidió que los precandidatos tuvieran acceso a los medios y cuando ellos desarrollaron sus propias campañas, tenían encima, como perros de caza, a los funcionarios de los cuerpos de seguridad tomando fotografías, haciendo videos y hasta colocando improvisadas alcabalas, para amedrentar a quienes reunían mayor cantidad de asistentes a los actos proselitistas. Incluso, se produjeron amenazas físicas a través de la vía telefónica, como en el caso concreto de la abogada Delsa Solorzano, abanderada de Encuentro Ciudadano.
En un desesperado intento por colocar a sus fichas de mayor confianza en el seno del Consejo Nacional Electoral, obligó a los rectores principales y suplentes a renunciar, no obstante que éstos no habían cumplido la mitad de su período; e inmediatamente procedió, a través de la Asamblea Nacional, a escoger a los nuevos funcionarios, incluyendo en el comité de escogencia a la propia esposa del presidente de la República, Cilia Flores, la misma que el lunes 23 se encargó de despotricar de la Primaria y girar instrucciones a órganos del Poder Judicial a investigar un supuesto abultamiento de electores.
Tal como había ocurrido en el desarrollo del proceso, fueron utilizados sujetos afectos al régimen (José Dionisio Brito Rodríguez y Luis Alejandro Ratti, principalmente) para decir que María Corina Machado estaba inhabilitada sin que se le hubiera hecho un juicio o que sería intervenida la Primaria por el Tribunal Supremo de Justicia, todo lo cual tenía como finalidad restarle confianza a la Comisión Nacional de Primaria y a las Juntas Regionales de Primaria, pero los integrantes de estas trabajaron duramente y, prácticamente, sin recursos y el día de la votación, las propias comunidades se mostraron solidarias con las personas que trabajaron en las mesas y en los centros improvisados, como casas de familia y hasta parques. Se demostró que este es un pueblo que actúa y se sobrepone a las dificultades, a las trabas y a los obstáculos que le coloque el régimen.
Como en este país casi todo se sabe, menos dónde se encuentran Tarek El Aissami y los 30 mil millones de dólares que desaparecieron de Pdvsa, ni tampoco de Héctor Rusthenfor Guerrero Flores (alias Niño Guerrero) y todavía el ministro Remigio Ceballos no entiende la forma cómo ese individuo tenía tanto poder en Tocorón; en política, se cuelan datos como que altos personeros del régimen, especialmente Diosdado Cabello y Jorge Rodríguez, han estado reuniéndose con el fiscal general, para ver cómo salen del atolladero en que se encuentra el régimen después de la Primaria, pero no han encontrado una salida porque ya la oposición formal tiene su candidatura propia, única, unitaria, que indudablemente se impondrá porque su respaldo se acrecienta en todas partes del país.
Porque como reza el viejo refrán “después del ojo afuera, no vale Santa Lucía,” al haberse efectuado el proceso de la Primaria no valdrá nada que se intente hacer para anularlas.
No sabemos si el régimen intentará utilizar al CNE para repetir que aquí no hay una sola oposición sino varias; pero si lo hace será para hacer su primaria en las que sean llamados a participar Javier Bertucci, Benjamin Rausseo, José Brito Rodríguez, Ratti y los llamados alacranes.
Que el lunes de esta semana, la Sala Electoral esté decidiendo dejar sin los efectos de una Primaria, que ya se hizo, y notificando al fiscal Tarek William Saab de unos supuestos delitos, no deja de ser manotazos de ahogado.
Todo lo que está pasando hace que yo recuerde otro refrán que he oído entre la gente: Al igual que el sol no se puede tapar con un dedo, ya el pueblo decidió que la representación democrática para las elecciones presidenciales del año próximo, tal como debe ser constitucionalmente, será Maria Corina Machado y, por nuestra parte, Encuentro Ciudadano está desde el mismo domingo de la semana pasada a su lado, contribuyendo a desplegar una campaña sincera, honesta y solidaria con la mayoría de la población, que confía en que habrá, definitivamente, un cambio político y económico, que pueda satisfacer las aspiraciones que todos tenemos de enrumbar a Venezuela hacia su mejor destino, concluyó sus declaraciones Simón Yústiz con otro refrán: Lo que es del cura va para la iglesia. Y la oposición formal con su legítima representante llegará electoral y constitucionalmente a Miraflores.
