La escasez de gasoil y las lluvias se han convertido este año en los principales obstáculos que han tenido que enfrentar los productores agrícolas del estado Portuguesa, para recoger la cosecha de maíz y para preparar las tierras para la siembra de nuevos rubros, toda vez que en la zona no ha estado lloviendo lo suficiente.
Ramón Elías Bolotín, director de la Confederación de Productores Agrícolas de Venezuela, Fedeagro, señala que en este mes de octubre cierra en Turen con 145 mm de precipitaciones, 14% por debajo de la media histórica.
Recuerda que el promedio del mes de noviembre se estima en 102 mm, según modelo predictivo IRI se espera un 40% menos de lluvias por efecto del fenómeno del Niño, lo que genera nuevos problemas para los trabajadores del campo.
Advierte que en Portuguesa preocupa el atraso en las labores de preparación de tierras y siembras de cultivos de verano por la escasez del gasoil, recuerda que siembras tardías no germinan bien y sufren ataques de áfidos y mosca blanca, agricultores de manos atadas.
Cerca de dos meses tienen los agricultores de Portuguesa, denunciando la problemática que enfrentan por la escasez de gasoil, lo que se ha convertido en un serio escollo para la recoger la cosecha de maíz, y comenzar a preparar las tierras para las siembras del ciclo de verano a lo que se suma que, mientras en otras regiones del país, ha estado lloviendo en exceso, en Portuguesa los niveles pluviométricos han estado menguados.
En riesgo exportación de ajonjolí
Por otra parte, Bolotín recuerda que el ajonjolí es después del frijol Mungo, el segundo producto de exportación del campo venezolano, advirtiendo que en Portuguesa, donde se produce el 95% del ajonjolí, la preparación de tierras y siembras están prácticamente paralizadas por la escasez del combustible Diésel.
Precisa que el poco combustible que está llegando se está utilizando para la cosecha mecanizada del maíz, no hay gasoil suficiente para las labores de rastreo ni siembras.
“No solo está en riesgo la entrada de divisas al país, también peligra el empleo en el campo. El ajonjolí es el cultivo extensivo que más demanda mano de obra rural para las labores de limpieza, corte, parado y procesamiento”, asegura Bolotín.