Por: Marisol Bustamante
Los venezolanos no buscan un cambio político desde la implantación del régimen chavista. Los venezolanos buscan históricamente un cambio desde sus orígenes colonialistas: La fundación Republicana fue producto de una exigencia de Cambio y la propia instauración democrática en 1958 y las transformaciones subsiguientes fueron precisamente parte de la presión social por lograr un sistema político de libertades y de garantías. Es así que la necesidad de cambio del país convertida en deseo y exigencia ha sido un anhelo arraigado desde los que nos antecedieron. Por eso no es casualidad el uso del vocablo lucha en nuestro lenguaje común.
Cuando saludamos al obrero, a la ama de casa, a la profesora, al taxista, al trabajador Informal, al comerciante, al agricultor, al estudiante, al profesional nos responden que están en momento presente de lucha. ¿Pero en la lucha contra quién, contra quienes y por qué?. Los venezolanos somos historia viviente de un proceso de luchas, de triunfos que ha dado a luz generaciones con formación politica del más alto nivel y con capacidad de haber llevado al país a estándares de desarrollo humano e industrial de referencia mundial. ¿Y entonces cómo fue posible perder parte de esto y a cuarta parte de la población en cuestión de poco más de dos décadas?
Cuando los sistemas se corrompen y no es posible identificar sus causas y mucho más allá, cuando quienes lo dirigen se adaptan y hacen todo por reproducirlo lo más seguro es que todo resulte en deterioro y anarquía. De allí la realidad que tenemos.
¿Qué hacemos por reconstruir y sacar el país adelante?.
Venezuela es la tierra de grandes deportistas, grandes músicos, grandes académicos, grandes científicos, grandes universidades, grandes obras entonces porque no tener buenos políticos? ¿Porque no tener una dirigencia que en su conjunto y al unisono entienda la necesidad de cambio?. ¿Cómo dar a luz un modelo de Democracia basada en la eficiencia, en la responsabilidad y en la trasparencia? Todo esto sí puede ser posible, con una dirigencia política que actúe en consonancia con las necesidades de los ciudadanos; una dirigencia que entienda la trasparencia como fundamento de la función pública y como columna vertebral del Estado de Derecho. El cambio comprende el ejercicio de una politica de responsabilidad y de compromiso, con propuestas transparentes en función de un sistema Democrático que tenga como centro de sus esfuerzos al Ciudadano, sin más ni más.
Lo civil de la Sociedad es su organización. Una sociedad organizada está fortalecida, movilizada y unida cuestión que tanto temen autocracias como las que hoy vivimos. Porque sólo la organización ciudadana y la unidad política pueden romper con la crisis que hoy vivimos y lograr un cambio que nos debe enseñar que la Democracia exige nuestra participación y atención en los asuntos políticos de forma permanente.
Marisol Bustamante
Politóloga/Directora de Trasparencia Ciudadana
Miembro de La Red de Derechos Humanos de Lara
@_bustamante31
