La planta de energía nuclear de Fukushima en Japón, anunció que comenzó a liberar este jueves el segundo lote de aguas residuales radiactivas tratadas después de que terminara la primera etapa sin problemas.
La compañía operadora de la planta Tokyo Electric Power (TEPCO), indicó que los trabajadores activaron las bombas para diluir el agua, tratada con grandes cantidades de agua de mar, para enviar la mezcla lentamente al océano a través de un túnel submarino para su liberación en alta mar.
Se espera que los vertidos de aguas residuales continúen durante décadas, luego del inicio con la primera etapa, el 24 de agosto, hasta el 11 de septiembre, en la que según la compañía fueron liberadas 7.800 toneladas de agua tratada al Océano Pacífico, de los 1,34 millones de toneladas almacenadas desde el terremoto y tsunami de 2011, cuando la planta quedó paralizada.
Esta operación ha recibido una dura oposición por parte de grupos pesqueros, productores y exportadores de productos marinos de Japón, afectados por la prohibición de China de importar suministros marinos del país vecino.
Ante la prohibición de importación de China en la Organización Mundial del Comercio, Ichiro Miyashita, ministro de Agricultura y el gobierno de Japón, están desarrollando estrategias para promover los productos del mar japonés y desestimar preocupaciones de seguridad por liberación de agua tratada de la planta.
En Corea del Sur, cientos de personas se han reunido este jueves frente a la embajada japonesa en Seúl en protesta, para exigir que Japón detenga la liberación de agua radiactiva al océano, con carteles que afirman “Oponerse a liberar la segunda agua radiactiva al océano”.
TEPCO y el gobierno de Japón expresaron que es inevitable descargar el agua al mar porque los tanques llegarán a su capacidad máxima a principios de 2024 y necesitarán espacio en la planta para el desmantelamiento que llevará décadas.