Su rechazo al Laudo Arbitral de Paris del 03 de octubre de 1899, instrumento devenido de un proceso arbitral fraudulento y contrario al derecho internacional, producto de la confabulación entre Estados Unidos de América y el Reino de la Gran Bretaña, mantiene Venezuela a través de un comunicado publicado por el ministro para Relaciones Exteriores, Yván Gil.
La información fue dada a conocer por el canciller Gil mediante un post en su cuenta de la red social X, en el que explicó que el Laudo Arbitral “se fraguó a espaldas de Venezuela.
«Hoy, al cumplirse 124 años de este nulo e irrito veredicto, mantenemos la inquebrantable voluntad de ejercer la defensa de nuestra integridad territorial. ¡El Sol de Venezuela nace en el Esequibo!”, puntualizó.
De igual forma, el documento refiere que Venezuela ha denunciado en múltiples oportunidades y comprobado con títulos y pruebas documentales, que el territorio de la Guayana Esequiba le pertenece y que el Laudo de París “ha sido la más vergonzosa y dolorosa acción contra su integridad territorial”.
El texto del comunicado expone:
La República de Venezuela, en ejercicio de sus legítimos e históricos derechos de soberanía sobre el territorio Esequibo, ratifica su firme y consistente rechazo de larga data al Laudo Arbitral de Paris de 03 de octubre de 1899, instrumento devenido de un proceso arbitral fraudulento y contrario al derecho internacional, producto de la confabulación entre los Estados Unidos de América y el Reino Unido de la Gran Bretaña, en contra de la integridad territorial de Venezuela.
El Laudo Arbitral de Paris del 03 de octubre de 1899, plagado de vicios de nulidad, se fraguó a espaldas de Venezuela bajo coacción y la constante amenaza del uso de la fuerza por parte de la corona británica. La arrogancia de las potencias imperiales de la época, el forjamiento de documentos y mapas, el uso de todo tipo de artimañas y la usurpación de la defensa venezolana, son solo algunas de las múltiples violaciones al Derecho Internacional que se han demostrado y definen este Laudo como írrito.
Venezuela ha denunciado y comprobado, a través de títulos y pruebas documentales, que el territorio de la Guayana Esequiba le pertenece y que el Laudo de Paris ha sido la más vergonzosa y dolosa acción contra su integridad territorial. El Reino Unido de la Gran Bretaña, al no poder sostener más esta patraña jurídica, accedió a firmar, en 1966, el Acuerdo de Ginebra y endosar la responsabilidad as Guayana al momento de su nacimiento como República, quien debe respetar dicho acuerdo como el único documento vinculante para la resolución de la controversia territorial.
Hoy al cumplirse 124 años de la emisión de este deplorable veredicto, con el cual la corona británica intentó despojar a Venezuela de su territorio en la Guyana Esequiba, la República Bolivariana de Venezuela, mantiene su rechazo a este dislate jurídico y confirma su inquebrantable voluntad de ejercer la defensa de su integridad territorial e insiste ante el Gobierno de la República Cooperativa de Guayana, que la única vía para la solución de la controversia es el diálogo directo entre las partes, como manda el Acuerdo de Ginebra de 1966.
