Venezuela ocupa, por segundo año consecutivo, el último lugar del Índice Internacional de Derechos de Propiedad 2023 (IPRI 2023, por sus siglas en inglés) que presentó la semana final de septiembre la Property Right Alliance, coalición de think tanks dedicadas a la defensa de los derechos de propiedad de la cual forma parte el Centro de Divulgación del Conocimiento Económico para la Libertad (Cedice Libertad).
En 2022, Venezuela también fue el país peor clasificado en este índice -superando a Haití- que analiza data de 125 países y los clasifica tras examinar tres componentes: entorno legal y político de los países, respeto a la propiedad física y respeto a la propiedad intelectual.
La puntuación más baja obtenida por el país (1,1/10) correspondió al entorno legal y político, que utiliza como indicadores la estabilidad política, el control de la corrupción y el Estado de Derecho, «ante la falta de independencia judicial y la existencia de un marco regulatorio que atenta contra la propiedad privada en el país», advierte Cedice.
La nación también registró 1,5/10 como puntuación en los derechos de propiedad física y 3/10 en los derechos de propiedad intelectual.
En la parte superior de la tabla en todo el mundo está nuevamente Finlandia, mientras que en la región de América Latina y el Caribe Uruguay fue se posicionó como el país con más garantías y respeto al derecho de propiedad, ubicándose en el puesto 29 del índice global.
Países con conflictos bélicos y que han sufrido fuertes desastres naturales superan a Venezuela en este índice que evalúa los derechos de propiedad.
Por ejemplo, la República de Yemen (2,4) Haití (2,7), República Democrática del Congo (3,1), Chad (3,1), Mauritania (3,2), Etiopía (3,2), Angola (3,2), Nigeria (3,4), Bolivia (3,4), Zimbabwe (3,4), Líbano (3,6), Irán (3,6), Camerún (3,6) y Mali (3,64) tienen una mejor clasificación que Venezuela en este reporte.
Tampoco hay libertad económica
Hace un par de semanas se conocieron también los resultados de un estudio elaborado por el Instituto Fraser de Canadá, en alianza con el Centro de Divulgación del Conocimiento Económico para la Libertad (Cedice).
En esa investigación Venezuela también ocupó el último puesto (165 entre 165 evaluados) en el Índice Mundial de Libertad Económica (EFW por sus siglas en inglés).
Por tercer año consecutivo, Venezuela está en la cola de este informe que evalúa cinco componentes de la libertad económica: tamaño de Gobierno, sistema legal y derechos de propiedad, moneda sana, libertad de comercio y regulaciones laborales y crediticias.
“La dolarización que ha tenido lugar en Venezuela en los últimos años ha ocasionado la pérdida de capacidad de bolívar como instrumento de cambio y reserva de valor, por esta razón, ya no puede considerarse una moneda sana”, reza el informe avalado por Cedice.
Venezuela obtuvo una puntuación general de 3,02 en una escala del 1 al 10 y la evaluación quedo de la siguiente manera: moneda sana (0,94/10), tamaño de Gobierno (4,65/10), derechos de propiedad (2,29/10), libertad de comercio (4,99/10) y marco regulatorio (2,17/10).