La agroindustria venezolana procesadora de maíz, pretende pagar a los productores nacionales US $340 la tonelada, cuando el costo de producción de una hectárea, con un rendimiento de 5.000 kilogramos supera los US $380 dólares, lo que evidencia que la oferta no cubre ni siquiera los costos.
Así lo dio a conocer el presidente de la Confederación de Asociaciones de Productores Agrícolas de Venezuela, Fedeagro, Celso Fantinel, quien señala que en estos momentos el sector oficial no participa en estas negociaciones y es la agroindustria la que fija los precios, en función de sus intereses, no en los intereses de los están produciendo en el campo.
En estos momentos, cuando se comienza a recolectar la cosecha, existe preocupación entre los agricultores, porque aún no se tiene certeza sobre el precio del grano, situación que es recurrente todos los años y que ha llevado a la organización gremial a proponer la suscripción de acuerdos previos entre la industria y los agricultores.
“Lo que pasa es que el país aún está en una espiral inflacionaria, los insumos suben, bajan, los financiamientos son costosos, porque hay gente que financia al 20%, si quieres dinero por la Bolsa Agrícola, hablamos de 20% y 25% en dólares anuales, no tenemos acceso a biotecnología, tecnología moderna, tenemos maquinarias obsoletas, con más de 40 y 50 años de uso; entonces no podemos ser
competitivos con países que financian sus exportaciones; de manera que nosotros cuando hablamos de precios, tenemos unos costos de producción de 5.000 k/ha, eso no se había visto antes y somos tan honestos, que lo exponemos, porque si vamos a gastar US$ 1.500 o US$ 1.600, obligatoriamente tenemos que sacar 5.000 o 6.000 kg/ha y hay que ser honestos en eso, y eso da entre US$ 380 y US$ 390 por hectárea”.
Utilizar franja andina de pecios
Asegura Fantinel que el precio de US $340/ton que ha puesto sobre la mesa Polar, supone que es el mismo precio que tienen en Colombia, ante el temor de que traigan harina desde el vecino país más barata que en Venezuela, pero ellos no tienen inflación, los impuestos en alimentos son de 6% y en Venezuela es de 15%, además del tema país.
“Por otro lado, si yo tuviera financiamiento, pudiera sembrar más barato, esta es la premisa, yo entiendo que tengo que ser competitivo, producir más, pero estamos en un entorno político y económico muy complicado y la propuesta que estamos llevando delante de utilizar la franja andina de precios es idónea y si vamos a entrar de nuevo a la Comunidad Andina de Naciones, ya tenemos un camino andado, la utiliza Ecuador, Perú, Bolivia y Colombia, que no la utiliza en maíz por el PLP con Estados Unidos, pero todos los demás lo usan con azúcar, arroz, palma , soya, todo está en base a la franja de precios de la Comunidad Andina; En Mercosur estamos suspendidos, pero el arancel de 15% que estamos utilizando es el arancel externo común que nos dio Mercosur y es insuficiente, esta franja de precios estabiliza lo que es el precio techo, piso, nos da un precio de referencia que esta siempre en el medio, que es el que tienen que tomar en cuenta si vas aumentar o a disminuir el arancel,
porque puede llegar un momento, como pasó hace dos años que el maíz se montó casi en US $500 puesto en Venezuela, a lo mejor la franja de precio lo hubiese colocado en US $420 o US $430, no en 500 dólares, lo cual es bueno para la industria formal, la que paga impuestos, no la informal que no paga ni impuestos ni aranceles, así que sería bueno adoptar este sistema para equilibrar, son 60 mediciones quincenales/año, cada año terminado, finaliza ahora en octubre, borras el año tres y te vienes a este nuevo año y posiblemente este nuevo año, como hubo alzas en los años anteriores, suba el precio; hoy día la franja de precios del maíz puesto en Venezuela es de casi US $390, no es una cosa descabellada, ni loca y realmente entendemos que es atractivo para la industria comprar maíz a US $300 dólares puesto en su planta, pero hay un país que necesita seguir adelante”.
El líder los agricultores venezolanos, recordó que el maíz está en 11 estados del país, donde motoriza la economía, asegurando que la actividad agrícola este año va a mover entre US $9.000 y US $10.000 millones, lo que se dice fácil; mientras que el sector construcción no mueve ni el 1% , cuando antes movían hasta el 16%; la industria no pasará del 10%, afirmando que siguen luchando y trabajando, produciendo alimentos para los venezolanos.“¿Necesitamos ayuda?, creo que sí, no es suficiente que te pongan un diésel en 10 centavos de dólar y que te pongan unos créditos con 200 millones de dólares al 6% anual, que es bueno pero insuficiente, el sector necesita US$ 1.500 millones/año por cinco años para despegar y garantizar una autonomía y soberanía agroalimentaria”, dijo Fantinel es una posición que más clara no puede ser y a la que no se puede dar interpretaciones mediatizadas.
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