Un llamado a la gran unidad nacional en la defensa del territorio nacional y su soberanía, que se encuentra seriamente amenazada en este momento, hizo la diputada por el estado Zulia, Lucrecia Morales García, de la Fracción Parlamentaria del partido UNT.
Morales García advirtió a la ONU, a la OEA y a Guyana, que el Esequibo es territorio venezolano y que no lo van a entregar para satisfacer los intereses de las grandes transnacionales petroleras.
Agregó, igualmente, que nuestro principal interés es Venezuela, y por tanto, el alma de cada venezolano debe estar volcada a la defensa del país, sobre todo, porque ahora, organizaciones internacionales que antes promovía la negociación bilateral entre Venezuela y Guyana, hoy conmina a nuestro país a aceptar un laudo arbitral que fue producto de una brutal componenda.
Advirtió que la hora presente no admite subterfugios, porque lo que está en juego es la soberanía nacional y esta no puede ser motivo de consulta a través de un referéndum, cuando se trata de un asunto de Estado.
Morales García también indicó que Venezuela está a punto de perder 150 mil 550 kilómetros cuadrados de su territorio, lo que nos hace mirar atrás y reconocer los errores que se han cometido a lo largo del tiempo.
Indicó que no se puede echar la culpa a la Venezuela de 1833, año de la invasión británica al territorio venezolano. En aquella época la naciente República de Venezuela, estaba devastada por la guerra de independencia que recién había sido sellada en 1823, con la batalla naval del lago de Maracaibo.
Reveló que, además, era un país mermado poblacionalmente, y en consecuencia, sus fronteras estaban desguarnecidas, lo que fue suficiente para las aspiraciones imperiales de Gran Bretaña.
Tampoco pudo Venezuela denegar la ejecución del fallo del laudo de 1899, a pesar de haberse opuesto al mismo, y solo hasta 1962 pudo reabrir la reclamación en el seno de la ONU, con base en el memorando que llegara, Severo Mallet-Prevost posmortem, quien había sido secretario del infame tribunal arbitral, donde se desveló que el fallo había sido nulo e írrito, producto de una componenda.
Desde entonces, subrayó Morales García, y luego de la firma del Acuerdo de Ginebra, nos acogimos a lo establecido en el artículo 4°ordinal 2° del mismo , que remite a los mecanismos de resolución pacífica de controversias previstos en el artículo 33° de la Carta de las Naciones Unidas.
Así, “Lo más lógico habría sido que desde esa fecha nos hubiéramos abocado a desarrollar una política de fronteras que nos permitiera poblarlas y llevar institucionalmente el Estado hasta las mismas”, sentenció.
Por otra parte, mencionó que en 1969 se pudo haber aprovechado el levantamiento del alto Rupununi al sur de la Guayana Esequiba que hubiera permitido recuperar el Esequibo, pero el gobierno del entonces presidente Raúl Leoni, declinó hacerse parte de la insurrección que había comenzado en el antiguo distrito de Rupununi, por respeto al orden internacional.
También dijo que después se cometió el error de suscribir el Protocolo de Puerto España en 1970 que congelaría la negociación por 12 años, durante los cuales se suponía que la realidad fronteriza cambiaría, pero nada de esto sucedió.
“Para colmo, los regímenes de Hugo Chávez y Nicolás Maduro prácticamente han regado el Esequibo”.
Morales García llamó a la unidad nacional para defender el Esequibo, rechazando el supuesto referéndum consultivo que se pretende convocar, así como instando a la aprobación del acuerdo que hoy se presenta ante el país y que refleja la posición del legítimo parlamento venezolano.
