Aunque ha debido comenzar este lunes el nuevo año escolar 2023-2024, este está en peligro de perderse porque el conflicto que surgió en enero se mantiene, debido a la insensibilidad, la incapacidad y la irresponsabilidad de Nicolás Maduro.
Así lo declaró el doctor César Pérez Vivas, candidato por el movimiento Concertación Ciudadana y otras agrupaciones políticas, al describir las dificultades que existen en este momento.
En primer lugar, los educadores, al igual que el personal administrativo y obrero del sector educativo, han sido víctimas del despojo de sus derechos reivindicativos. La Oficina Nacional de Presupuesto, en forma arbitraria, ilegal e inconstitucional, les quitó los salarios que devengaban, los beneficios contractuales (Hospitalización, Cirugía y Maternidad, seguro funerario, primas por antigüedad, primas por desempeño de sus funciones, etcétera) y los derechos a vivir dignamente, ya que ahora ni siquiera pueden acceder a tener un techo propio.
En segundo término, los planteles de todo el país se encuentran en más del 60 % en condiciones deplorables; es decir, que no tienen los mínimos servicios de agua potable, energía eléctrica, baños en buenas condiciones, comedores escolares, bibliotecas, computadoras, servicio de Internet, ni canchas deportivas.
En tercer lugar, en mis recorridos he podido hablar con mucha gente y tanto madres y padres de familia, así como los abuelos y tíos que están al cuidado de los niños cuyos padres se fueron del país, no disponen de los recursos necesarios para adquirir los uniformes y los textos escolares. De estas necesidades, el gobierno ni siquiera ha pensado que debería resolverlas porque la educación es una obligación que tiene el Estado venezolano, constitucionalmente.
Como cuarto punto puedo apuntar que la calidad de la educación venezolana se ha perdido, porque al gobierno no le ha importado que el conflicto planteado se haya extendido tanto tiempo y, en lugar de resolverlo, optó por establecer dos días de clases a la semana para así, de la manera más irresponsable, dejar que los alumnos puedan ver algo de los programas y no todo. Y para colmo de males, promoverlos sin exámenes, para decir después que la nómina de escolares ha sido atendida, cuando es todo lo contrario.
Y quinto, si los alumnos no fueron bien preparados el año escolar que culminó en julio, ni se ha planteado un programa de recuperación para ellos, y de persistir el conflicto porque no hay respuesta a los planteamientos hechos por el sector educativo, se corre el riesgo de perderse el nuevo año escolar por esta y las razones antes mencionadas, declaró el doctor Pérez Vivas.
“Por eso es que se necesita salir de este mal gobierno, porque no atiende ni a los educadores, ni a los educandos, ni a nadie en Venezuela”, finalizó Pérez Vivas.
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