Nicolás Maduro está tan desesperado, ante el enorme rechazo que tiene su régimen, que ya no encuentra qué hacer y por eso, como ocurrió a fines de la semana pasada, montó un supuesto encuentro productivo nacional en Barquisimeto, más que todo con fines turísticos que para hacer una evaluación de lo que se está haciendo en el país.
Al hacer esta declaración, el ex diputado Simón Yústiz, de la Asamblea Nacional, manifestó que todas las vías del oeste de la ciudad fueron bloqueadas para que el jefe del gobierno manejara un vehículo y se dieran a conocer unos videos, en los cuales el ocupante de Miraflores habla de la atractiva que se encuentra la ciudad.
Lo que no dijo, continuó expresando el ex parlamentario, es que fueron traídas personas de todo el país, supuestamente campesinos, en buses que llenaron, prácticamente, las principales vías del sector, donde se realizó el mencionado encuentro.
Desde mediados del año se ha venido promoviendo una serie de actividades de distracción, en particular conciertos con artistas internacionales, para dar la sensación de que Venezuela está muy alegre cuando la realidad nos indica que los problemas se siguen agravando, en todas partes, porque los servicios públicos no sirven y sobre todo la salud es una calamidad, ya que los familiares de los enfermos tienen que estar comprando todos los insumos para que sean atendidos en los hospitales, pues, éstos carecen de hasta jeringas.
Yústiz, quien integra el comando de campaña de Delsa Solórzano, del partido Encuentro Ciudadano, a la Primaria del 22 de octubre, manifestó que haga lo que haga Maduro, éste tiene el mayor rechazo nacional.
Las encuestas coinciden en que no pasa del 11 % se postula para las presidenciales del 2024 y es por ese motivo que tanto él, como Diosdado Cabello, en una actitud de desprecio al pueblo venezolano y violación a la Constitución, viven repitiendo que están preparados para adelantar las elecciones.
Delsa Solórzano y demás precandidatos y precandidatas a la Primaria están demostrando que ese pueblo, que viene sufriendo penurias, rechaza a Maduro y, en general, al régimen porque los ha sumido en la pobreza y la desesperación, motivos por los cuales hay más de ocho millones de venezolanos en el exterior, porque se fueron ante la imposibilidad de tener un salario digno como lo establece la propia Constitución, remarcó Yústiz. La gente, incluyendo a quienes esperanzados votaron por el chavismo, ya no quiere saber más del llamado socialismo del siglo 21, cuyo derroche en espectáculos y movilizaciones es parte de la corrupción.