Yevgeny Prigozhin, el líder de mercenarios que encabezó una breve rebelión armada contra el ejército ruso hace unos meses, fue dado por muerto el miércoles luego de que un avión se estrelló al norte de Moscú y las 10 personas que iban a bordo fallecieron.
Prigozhin iba en el avión, según la agencia rusa de aviación civil, que citó información de la aerolínea. El siniestro generó sospechas inmediatamente, ya que el destino del fundador de la empresa militar privada Grupo Wagner ha sido objeto de intensas especulaciones desde que organizó el motín.
En su momento, el presidente ruso Vladímir Putin señaló que la rebelión era una “traición” y una “puñalada por la espalda” y prometió venganza. Pero al poco tiempo se retiraron los cargos contra Prigozhin. Al jefe de Wagner se le permitió retirarse a Bielorrusia, aunque al parecer visitaba Rusia de vez en cuando.
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El siniestro se produjo también después de que los medios de comunicación rusos informaron que un alto general vinculado a Prigozhin había sido destituido de su cargo de comandante de la fuerza aérea.
Un avión con tres tripulantes y siete pasajeros que se dirigía de Moscú a San Petersburgo cayó a casi 300 kilómetros (185 millas) al norte de la capital, de acuerdo con declaraciones de funcionarios reportadas por la agencia de noticias estatal rusa Tass.
La agencia de aviación civil rusa, Rosaviatsia, informó que Prigozhin aparecía en la lista de pasajeros y más tarde dijo que, según la aerolínea, efectivamente iba a bordo.
Anteriormente, Vladímir Rogov, un funcionario designado por Rusia en la región parcialmente ocupada de Zaporiyia, en Ucrania, dijo que habló con comandantes del Grupo Wagner quienes también confirmaron que Prigozhin iba en el avión, al igual que Dmitry Utkin, cuyo apodo Wagner se convirtió en el nombre de la compañía.
“No sé exactamente lo que ha ocurrido, pero no me sorprende”, dijo el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Keir Giles, experto en Rusia del centro de estudios sobre asuntos internacionales Chatham House, había pedido cautela ante los reportes de la muerte de Prigozhin. Dijo que “múltiples individuos han cambiado su nombre por el de Yevgeny Prigozhin como estrategia para ocultar sus viajes”.
Datos de rastreo de vuelo analizados por The Associated Press mostraban que un jet privado que Prigozhin había utilizado anteriormente despegó la tarde del miércoles de Moscú y que la señal de su transpondedor desapareció a los pocos minutos.
La señal se detuvo repentinamente mientras el avión se encontraba viajando con altitud y velocidad. Una imagen publicada por una cuenta partidaria del grupo Wagner en redes sociales mostraba fuselaje en llamas, y se podía ver un número parcial de registro que coincidía con el de un avión que Prigozhin había utilizado en ocasiones anteriores.
El canal Grey Zone, un grupo a favor de Wagner, compartió videos en Telegram en los que se podía ver a un avión cayendo en picada desde una enorme nube de humo, girando sin control durante su caída. Este tipo de desplomes suelen ocurrir cuando una aeronave sufre daños graves, y un análisis cuadro por cuadro de los dos videos por parte de la AP muestra que coincide con algún tipo de explosión a medio vuelo. En las imágenes parece que a la aeronave le falta un ala.
La Comisión de Investigación de Rusia abrió una pesquisa sobre el choque por violar las reglas de seguridad aérea, tal como ocurre en este tipo de indagaciones. Según la agencia noticiosa Interfax, funcionarios de seguridad habían informado previamente el jueves que los 10 cuerpos habían sido recuperados del lugar del choque, poniéndole fin a las operaciones de búsqueda.
Incluso si se confirma, es poco probable que el deceso de Prigozhin tenga repercusiones en la guerra en Ucrania, en donde sus soldados protagonizaron algunos de los combates más encarnizados de los últimos 18 meses.
Sus fuerzas se retiraron de las acciones en el frente después de la captura de Bájmut, una ciudad en la región oriental de Donetsk, a finales de mayo. Bájmut había sido escenario de posiblemente los combates más cruentos de toda la guerra, y las fuerzas rusas lucharon durante meses para tomar la localidad.