#OPINIÓN Memoria política #23Ago

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“El término memoria política remite a la idea de que hay pueblos que recusan su pasado (“este pueblo no tiene memoria”) y otros que recusan el olvido. Sin embargo, sabemos que no existen tales antinomias, porque recordar y olvidar no constituyen oposiciones absolutas”. 

Más bien se trata del hecho de que la sociedad venezolana parece haber escogido ¿o es un hecho impuesto por la genética? el tener memoria corta o limitada, sin olvidar la posibilidad que nos ofrece la psicología, al calificarla de memoria selectiva. No obstante las extremadamente negativas experiencias vividas en Venezuela en los últimos 30 años, el instinto de conservación (el aprecio o consideración que uno tiene de sí mismo) nos debería haber convertido en personas en quienes la memoria fuese más leal con los acontecimientos y sus consecuencias vividas en estos tres decenios.

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Parece, por lo visto, que a los venezolanos, muchos e importantes acontecimientos se nos olvidan y en poco tiempo. Me refiero en esta oportunidad a las consecuencias de la acción de Chávez y sus cómplices cuando en febrero de 1992 intentaron derrocar al gobierno legalmente constituido y echar al suelo nuestro sistema de libertades políticas, sociales y económicas, bases de la institucionalidad de la República, representadas todas ellas en los primeros artículos de la Constitución, convertida en ley de la República el 23 de enero del año 1961 y de la cual cito los artículos 1 y 3:

Artículo 1.- La República de Venezuela es para siempre e irrevocablemente libre e independiente de toda dominación o protección de potencia extranjera.   

Artículo 3.- El gobierno de la República de Venezuela es y será siempre democrático, representativo, responsable y alternativo.

Chávez calificó la Constitución del año 1961 como moribunda, en estado de pre muerte, cuando fue gracias a ese texto que salvaguardaba los derechos de sus ciudadanos, le permitió a él, un subversivo y autor intelectual de la muerte de 144 venezolanos en su intento golpista e de magnicidio en grado de frustración, ascender a la presidencia, al beneficiarse de una medida adoptada conforme lo establecido en la ley.              

El presidente Caldera, en uso de sus atribuciones, dictó una medida de sobreseimiento. Esta, en honor a la verdad, fue solicitada casi unánimemente por el establishment político y empresarial. Chávez salió en libertad plena y con sus derechos civiles intactos.  Esa Constitución, la del 23 de enero de 1961, es considerada por muchos jurista especialistas en derecho constitucional como un texto excelente, por su adaptación a la realidad de Venezuela post dictadura y por la visión de futuro que tuvieron los legisladores, quienes en su redacción, miraron el interés de la patria y no el de intereses subalternos y mezquinos. Fue derogada el 15 de diciembre del año 1999.

Ya han transcurrido 31 años desde ese triste acontecimiento de nuestra historia socio política. ¿Cuántas generaciones de venezolanos no han vivido en lo que era nuestro sistema de libertades? Bueno la respuesta se adapta generalmente al promedio de la edad fundamentalmente de la madre de sus ciudadanos. En Venezuela hasta los años 2020, la mujer venezolana paria a muy temprana edad. Así podemos ver que Venezuela “es el país de Sudamérica con mayor tasa de embarazo adolescente. Y el tercero de todo el continente solo por detrás de Nicaragua y República Dominicana. Según datos de la Organización de Naciones Unidas, 91 de cada 1.000 gestantes tiene menos de 18 años de edad. Por lo tanto se podría  afirmar que desde el intento del golpe del año 1992 hasta hoy, en Venezuela se han conformado prácticamente dos generaciones.

En ese intento, como recordaremos, el presidente de la República, el Sr. Carlos Andrés Pérez, democráticamente elegido, se escapó de ser asesinado por un celestial milagro y por la valentía de un militar institucional y cumplidor de su deber, el Contraalmirante Mario Iván Carratú Molina, jefe de su seguridad. En ese criminal intento de golpe, murieron 144 venezolanos, incluyendo  jóvenes soldados de la patria, caídos bajo el fuego de las armas que la República le había confiado. Eran las armas para la defensa de la soberanía nacional y de nuestro sistema de libertades, no para asesinar a compatriotas como ocurrió con el movimiento clandestino MBR inspirado inicialmente en los mayores Ortiz y Urdaneta.

Me temo que los acontecimientos de los últimos 30 años nos han retratado como un pueblo inocente con una corta memoria, cuando pocos años después, elegimos a ese delincuente embustero y cleptómano, votándolo abrumadoramente como Presidente de la República. Y no conformes con esa afrenta a la civilización moderna, hemos permitido que ese mismo grupo haya continuado en el saqueo patrio por 24 largos y sufridos años.

Apreciados lectores, ¿podríamos devolver la cinta un par de años antes de las elecciones de 1998? Entonces comencemos por recordar que Chávez llega de la mano y con la ayuda financiera y logística de algunos personajes venezolanos formados y educados con el patrocinio de esa constitución, a la cual aquel fatídico 2 de febrero de 1999, el hoy muerto de Sabaneta juró declarándola, irrespetuosamente, moribunda.

Desgraciadamente así fue, lo subieron en un pedestal al calificarlo como aquel que representaba la salvación del país. ¿Por qué? ¿Es que estábamos pasando hambre? ¿Es que el salario mínimo mensual era como actualmente es, de 5 dólares o  para el año 1998 de 218 dólares mensuales ?. política

¿De verdad, necesitábamos un cambio ? ¿Y por qué ? ¿Es que acaso la nación estaba quebrada y arruinada? ¿Es que no se podía manifestar sin ser víctima de las bombas lacrimógenas como ocurre actualmente ?  Y continúo preguntándome, ¿pero por qué? ¿Es que se practicaba  la tortura como política de estado en los calabozos de la PTJ o en la DISIP? ¿Así como ocurre hoy en la DGCIM o en Helicoide? ¿O es que la población venezolana había visto con anterioridad como un oficial de la marina militar se desplomaba, muerto, delante del juez por las torturas infligidas horas antes de su comparecencia ante la autoridad judicial?

Y los muy necios continuaban repitiendo: necesitamos un cambio. ¿Por qué nuestra industria del petróleo no era eficiente? cuando era el tercer conglomerado petrolero en jerarquía del mundo. ¿ Por qué el precio de la gasolina era impagable o el precio era de US $0,014 centavos de dólar por litro y se conseguía cuanta quisieras en todo el territorio de la República? ¿Por qué, acaso era que el sector empresarial, representado en Fedecámaras y Conindustria no gozaba de total libertad económica? ¿La economía venezolana y sus representantes tenían necesidad de festejar vulgares chistes al presidente de turno ? ¿ O aplaudirle sonreídos, mientras el actual presidente echa un pie con la primera dama ?

La verdad verdadera es que se equivocaron de bola a bola. Calcularon mal los asiduos visitantes del happy hour del Caracas Country Club, los intelectuales de izquierda y los periodistas que lo visitaban semanalmente, llevándole kilos de libros, que después se supo que ni uno solo leyó.

Pues sí, parece que los amos del valle calcularon mal al considerarlo sólo un zambo de nariz achatada con poca formación política y cultural, pensando que a aquel comandante   (graduado en radiocomunicaciones, no era paracaidista, otro cuento de caminos) lo iban a manejar, así como el tuitero maneja sus muñecos o el cameraman a su entrevistado. Pero resulta que el considerado inculto, que sí lo era, también era un perfecto bandido y mejor actor, haciéndose pasar como un militar ignorante, que era exactamente lo que ese grupo creía de él, pero Chávez, si, el comandante, simplemente los engañó y como la canción de Wilfrido Vargas con su Barbarazo, Chávez hasta el queso se lo comió.

Chávez era realmente un monstruo, quien desde muchos años atrás hacía vida política clandestina en los barrios de los cerros de Caracas, como dirigente del PRV Ruptura, de la mano de Douglas Bravo y bajo el seudónimo de Jose Antonio. Pues ese zambo, ese inculto acabó con ellos, les expropió sus medios de comunicación, sus industrias, sus empresas y no les pagó, muchas de ellas formadas en el tiempo, con grandes sacrificios de sus fundadores.

Como venezolano siento las vicisitudes que han tenido que pasar esos grupos empresariales, como El Nacional, el medio que creaba la opinión política en Venezuela, o como Radio Caracas, orgullo de nuestra radio y de nuestra televisión, tras el desengaño con el comandante. Pero más lo siento y en lo profundo de mi alma, por los millones de venezolanos que perdieron sus puestos de trabajo, por los millones de venezolanos que han visto por necesidad ver partir con destinos desconocidos e impensables a sus seres queridos. Lo siento por los millones de venezolanos que solo hacen una comida al día, generalmente compuesta de spaghetti y salsa mayonesa. Lo siento por ese pueblo de los 5 dólares mensuales; lo siento profundamente por los profesores universitarios que pasaron una vida estudiando y preparándose para darles a nuestros hijos la educación que la UNESCO consideraba al final del siglo XX como la más avanzada de Latinoamérica, lo siento por los niños que mueren diariamente al estar cerrado con candado rojo rojito el servicio de trasplantes del hospital J M de los Ríos, lo siento mucho por todos nuestros niños, la esperanza de la patria, que ya no gozan, por inexistente, del excelente servicio de pediatría, que los gobiernos democráticos habían institucionalizado sin distingos de condición económica, social, de raza y menos por razones políticas.

Si, así era Venezuela hasta que entronizamos al sobreseído.

Memoria corta de un pueblo. Memoria corta combinada con cinismo de nuevo riquitos hijos del petróleo patrio y de la corrupcion. Y ahora casi todos estos últimos en Miami o en Madrid soñando con el día que llegue el cartero con la buena nueva: le anunciamos que ya puede pasar a retirar su pasaporte, el soñado azul o el marroncito de la U.E.

Raúl Ochoa Cuenca, en Anfi del Mar el 19 de agosto del año 2023.

Anexo: La producción de nuestra industria de petróleo hasta el año 1999.

En 1998, la producción de Venezuela fue de 3.279 MBD de petróleo crudo, 170 MBD de GLP (gas líquido de petróleo) y 3.965 MMPCD (millones de pies cúbicos por día) de gas natural, lo que equivale a una producción total de 4.133 MBPD de petróleo equivalente, con unas reservas de 76.108 MMB de petróleo crudo y 146.573 BCF de gas natural, un aumento significativo en comparación con 1975.       

Del mismo modo, en 1998, PDVSA tenía una capacidad neta de refinación de petróleo crudo de 3.096 MBPD, de los cuales 1.620 MBD estaban en Venezuela (incluida la Refinería Isla en Curazao), 1.222 MBD en los Estados Unidos y 252 MBD en Europa; esto como resultado de que PDVSA ejecutó con éxito, durante las décadas de los 80 y 90 del siglo XX, la llamada «Estrategia de Internacionalización.

Escrito por el Ing. Luis A Pacheco el 17 de octubre del año 2018.

Raúl Ochoa Cuenca

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