Durante una visita de inspección al Embalse Los Quediches, ubicado en la parroquia Las Mercedes del municipio Torres, el gobernador del estado Lara, Adolfo Pereira, observó el humo que generaba la quema de árboles en las adyacencias de la presa hídrica que trae como consecuencia la disminución del vital líquido, afectando a toda la población.
El mandatario regional en compañía de Joel Tifor, presidente de Hidrolara; Carlos Álvarez, trabajador del Ministerio del Poder Popular para la Atención de las Aguas y voceros del poder popular, lamentó esta situación y ordenó acciones inmediatas para contrarrestar la tala y quema indiscriminada.
«Esto no puede quedar impune, ordeno al prefecto nombrar una comisión para que investigue quiénes son los culpables. Los mismos seres humanos estamos acabando con nuestro ecosistema, esto ocasiona que los afluentes del embalse se sequen y por ende no habrá agua para las familias», explicó.
En este sentido, Carlos Álvarez, calificó la tala y quema de árboles como una injusticia que atenta contra la vida del ser humano. «Sus acciones nos afectan a todos por igual, la vida humana y de animales está en peligro si continuamos acabando con nuestro planeta.
Hago el llamado a la conciencia; y de no recapacitar se deben tomar medidas drásticas, pero esto no lo podemos seguir permitiendo», puntualizó.