Pedro es un muy conocido y reputado profesional, auditor de empresas y ha sido Socio Principal de la firma que representa a Price Waterhouse Coopers en Venezuela desde hace 85 años. PwC es una de las más grandes y reputadas empresas mundiales de auditoría externa. Es decir, que Pedro conoce a los bancos “de arriba abajo”.
La decisión de los bancos venezolanos de elegir como presidente de la Asociación Bancaria de Venezuela a Pedro Pacheco Rodríguez es un hito histórico porque Pedro no es ni ha sido accionista de ningún banco, así como tampoco ha trabajado en ninguno de ellos. Casi siempre los presidentes de gremios son accionistas o altos gerentes de las empresas agremiadas; pero eso no es lo ideal.
Hasta aquí ya hemos identificado seis rasgos fundamentales del presidente ideal de cualquier gremio empresarial: Independencia, profesionalismo, experticia, honestidad, discreción y reputación.
Según estudios que hemos realizado sobre gremios en varios países, estos rasgos coinciden con los perfiles de presidentes de grandes gremios en los países más desarrollados y en países que, sin haber alcanzado grandes niveles de desarrollo, también se destacan por su afán por profundizar la institucionalización de las relaciones gobierno-empresa.
Institucionalización significa implantar reglas de juego y relaciones con base en criterios orientados a buscar el equilibrio entre los intereses empresariales, los gubernamentales, los de la clientela y el desarrollo del país en general, lo que equivale a que dichas reglas sean aceptadas por la mayoría y eso las haga sustentables y sostenibles. Esto implica muchas cosas que suponen el desarrollo de una dinámica mejor a la usual.
Primero, el presidente del gremio, al ser independiente, no puede ser presionado por el gobierno de manera que sienta amenazada la integridad de su negocio, pues no es accionista de ninguna empresa del ramo.
Segundo, ese presidente reconocido como excelente profesional, tampoco puede ser presionado por las empresas que representa para que plantee políticas profesional o institucionalmente inconvenientes porque no puede “echar su reputación por la borda”.
Tercero, el institucionalismo obliga a actuar orientados al bien común, al equilibrio de intereses, en vez de actuar con miras cortoplacistas o por intereses particulares. El sesgar las cosas de manera que se beneficie una parte y no el todo no es sostenible, no inspira confianza ni es sustentable; genera presiones o conflictos que obligan a cambiar las reglas del juego a demasiado corto plazo o a perjudicar a uno de los sectores involucrados por demasiado tiempo, como sucede cada vez que los gobiernos gobiernan según sus criterios ideológicos, en vez de buscar el entendimiento y equilibrio de intereses. Por esto último, los bancos venezolanos se han minimizado. Veremos qué puede hacer Pedro al respecto: Por el bien de toda la sociedad, es necesario reenfocar la lucha contra la inflación, dejando de basarla en recortar la liquidez y el crédito bancario mediante un alto Encaje Legal, lo cual nos ha empobrecido a todos, y pasar a incrementar el crédito para elevar la oferta, el empleo y mejores salarios.
El otro reto de fondo de Pedro es promover la COOPETICIÓN. ¿Y eso qué es? La coopetición es un concepto que plantea a los empresarios cooperar y competir simultáneamente. Para ningún gremialista este planteamiento debería ser sorpresa porque los gremios empresariales, sectoriales como regionales, se crean para cooperar entre competidores. Ésto se practica; pero no con la extensión, profundidad, frecuencia, conciencia y sistematización que el concepto amerita.
Un caso famoso de coopetición es la asociación entre Apple e IBM, comenzando en 2014, para desarrollar aplicaciones móviles para empresas que utilizan el sistema operativo iOS de Apple y la plataforma de computación en la nube de IBM. Esta alianza le permitió a Apple expandir su alcance en el mercado empresarial aprovechando la gran fuerza de ventas de IBM en software empresarial. Mientras que IBM pudo aprovechar el creciente mercado móvil de Apple mediante el desarrollo de aplicaciones para dispositivos iOS. Esta colaboración dio como resultado un conjunto de aplicaciones empresariales móviles, que incluye herramientas de servicio al cliente, finanzas y gestión de la cadena de suministro.
Al combinar sus respectivas fortalezas, pudieron crear una nueva oferta de mercado que era más atractiva y competitiva que la que podrían haber logrado por su cuenta.
Necesitamos crear departamentos de Análisis de Oportunidades de Coopetición en todos los gremios empresariales u oficinas de asesores que apoyen esta función.
Son muchos más los retos de la reinvención gremial, los cuales enumeraremos en nuestro próximo artículo. Por ahora, ¡Felicitaciones a Pedro y a los banqueros que tuvieron la inteligencia y el desprendimiento para elegirlo!
@joseagilyepes