Según lo determinó el más reciente informe del Monitoreo de Servicios Básicos del Observatorio de Gasto Público de Cedice Libertad -OGP, buena parte de los venezolanos estima que los productos que contiene la bolsa Clap son de baja calidad, sus mecanismos de distribución son ineficientes y la mayoría prefiere que la economía mejore para que la gente pueda comprar lo que necesite.
Este estudio se efectuó en el mes de junio y es el resultado de la información recabada de 12 monitores distribuidos en todo el país, encuestas a 2.300 ciudadanos y la revisión de información en 25 medios de comunicación digitales y tres redes sociales en simultáneo, fue coordinada por el economista Raúl Córdoba, investigador del OGP de Cedice Libertad.
La investigación detectó que en zonas con graves problemas de acceso el pago por concepto de transporte sobrepasa el valor de la bolsa y los cronogramas de distribución no son consistentes.
Nuevos aportes
A la tradicional pesquisa de los servicios básicos electricidad, telecomunicaciones, agua, transporte, vialidad y recolección de desechos que formula el monitoreo, se incorporan los ítems categorizados como bienes públicos: salud, educación y el beneficio de alimentación representado en el sistema Clap.
La encuesta del OGP señala que “al menos el 50% de las personas que reciben la bolsa venden o intercambian parte de los insumos pues consideran son de muy mala calidad , en tanto que 25% considera que se podría mejorar con el apoyo del sector privado. El 23% aplaude la iniciativa aunque resalta que algunos productos son de baja calidad”.
Es de destacar que 78% de los encuestados preferirían que se eliminen esos servicios de distribución, con la expectativa de una mejora sustancial en la economía nacional que promueva la adquisición de los productos alimenticios en donde más le convenga al ciudadano.
“Sólo el 6% de los encuestados aseguró que necesita la bolsa para subsistir siendo ese el único medio de alimentación al mes. 51 % Resaltó que existen irregularidades con la distribución y los insumos. Así como también que no existen canales de denuncia y no todas las bolsas con iguales, para los empleados públicos emplean productos de mejor calidad que para los habitantes de sectores populares que reciben la bolsa Clap”, reveló la investigación del OGP.