El secretario general de la ONU, António Guterres, ha denunciado este jueves que el planeta ha entrado en la «era de la ebullición global», tras conocerse que julio de 2023 ha sido el mes más cálido jamás registrado por la humanidad.
Guterres ha calificado el cambio climático de «aterrador» y ha instado a los líderes mundiales a actuar con urgencia y responsabilidad para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Según un informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el observatorio europeo Copernicus, la temperatura media global de julio ha sido de 16,95 grados Celsius, superando el récord anterior de 16,63 grados establecido en julio de 2019.
Además, el 6 de julio se registró el día más caluroso de la historia, con una media de 17,08 grados. El informe señala que este calor «no tiene precedentes» en miles de años y que es consecuencia directa de las actividades humanas.
Guterres ha lamentado los efectos devastadores del cambio climático en diferentes regiones del mundo, donde se han producido inundaciones, incendios, sequías y olas de calor extremas. «Es un desastre para todo el planeta», ha dicho, recordando que los más afectados son los niños, las familias y los trabajadores más vulnerables.