El crecimiento económico mundial será levemente mejor a lo previamente proyectado por el Fondo Monetario Internacional, pero “persisten muchos desafíos y es demasiado temprano como para festejar”, declaró el martes el principal economista de la organización.
Pierre-Olivier Gourinchas, economista del FMI, ofreció su evaluación mientras la institución prevé que el crecimiento económico mundial disminuirá a un estimado de 3% en 2023 y 2024, una reducción con respecto al 3,5% de 2022.
Pero las proyecciones más recientes suponen un aumento de 0,2% con respecto a las publicadas en abril, cuando el FMI pronosticó que la economía mundial este año crecería menos de 3%, incrementando el riesgo global de hambre y pobreza.
Pese a la leve mejora, el crecimiento económico mundial “sigue débil según estándares históricos”, dice el reporte del FMI. Pero Gourinchas dijo en un blog el martes que “a corto plazo, las señales de progreso son innegables”.
El FMI vaticinó además que la inflación mundial bajará de 8,7% en 2022 a 6,8% en 2023 y 5,2% en 2024.
La organización dijo que cuando Estados Unidos pudo evitar un impago al resolver el impasse sobre el límite de endeudamiento, ello “moderó los riesgos adversos para el panorama económico”.
Sin embargo, añadió que la amenaza inflacionaria debido a la invasión rusa de Ucrania y el potencial de fenómenos climáticos extremos podría llevar a los bancos centrales a aumentar las tasas de interés u obligar a los líderes mundiales a aplicar medidas económicas más restrictivas.