La detención que se ha registrado de algunos agricultores por botar parte de sus cosecha, es la más evidente manifestación del desconocimiento que tiene el régimen, de lo que es el trabajo de la producción de alimentos en el campo, asegura el presidente de la Federación de Asociaciones de Productores Agrícolas de Venezuela, Fedeagro, Celso Fantinel.
Revela que han enviado una comunicación al ciudadano Fiscal General, Tarek William Saab, solicitando una audiencia urgente, para conversar sobre esta problemática, por cuando el suministro de combustible no es problema que le compete a los productores del campo.
Afirma que el Ministro de Agricultura conoce a fondo esta problemática, pero no se pronuncia aun cuando está viendo las consecuencias que están pagando los agricultores, que son los eslabones más débiles de la cadena.
De esta forma señaló que como organización gremial, no quisieran retornar a la política del “regalado”, señalando que hay pobladas de 1.000 o 2.000 personas que producen en esas zonas entre 200 mil y 300 mil kilos de zanahorias, señalando como ilógico que alguien tome, por ejemplo, 20.000 kilos de zanahorias para regalárselos a la Iglesia.
Advierte que quienes vivimos en la ciudad no padecen, lo que sí sufren los que viven en el campo, donde hay estaciones de servicios que quedaron para museos, totalmente cerradas y abandonadas, lo que obliga a hacer colas en las estaciones operativas, dejando los vehículos hasta tres días.
“Insisto, hay algunas capitales de estados donde tratan más o menos de surtirse de gasolina, pero cuando vas a los pueblitos más alejados de la civilización, la situación es diferente, por eso somos solidarios de verdad con los agricultores, ya fueron liberados el de Mérida que le dieron libertad plena y el de Trujillo bajo presentación, le enviamos una carta al Fiscal para conversar, porque dentro del diálogo nos podemos entender, el ministro de Agricultura ha debido pronunciarse y no lo ha hecho, ya que él sabe lo que está pasando”, dijo Fantinel.
Además advirtió que a los agricultores les cancelan sus cosechas a veces 4 o 5 veces menos del valor que cancelan los consumidores a cielo abierto o en los supermercados, invitando al Fiscal a que se dé una vuelta por los supermercados y mercados a cielo abierto para que vea que han estado abastecidos en los últimos tres años.
“Por eso lo que necesitamos es que nos ayuden con unas cadenas de frío más robustas, que nos ayuden con las alcabalas que siguen fregando la vida a los transportistas, y al final del día el consumidor termina cancelando unas hortalizas y unas frutas más costosas y allí perdemos la competitividad que pregonamos en nuestras asociaciones con nuestros productores, las perdemos por la ineficiencia de la cadena, esa es la gran verdad”, afirmó Fantinel.
Explicó que un saco de zanahorias de 50 kilos, cuesta entre 5 y 6 dólares en el campo; un saco de cebollas de 60 kilos, cuesta alrededor de $15; una cesta de tomate de 20 o 24 kilos cuesta $2 en el campo y la gente no la quiere ir a buscar, debido al problema del bajo poder compra y a esto se suma que las hortalizas y las frutas son altamente perecederas y sin una cadena de frío en 72 horas estos productos ya se comienzan a dañar.
Por último Fantinel que las cosechas de hortalizas del año 2022 fueron similares a las de finales del año 78 y los años 82, indicando que hemos retrocedido 40 años, mientras que en esa época la población no supera los 16 millones de habitantes, lo que evidencia que el venezolano no está consumiendo hortalizas y frutas y el esfuerzo que hace el productor sacando dinero de su bolsillo, para seguir en la actividad y esto va a ocurrir con el café, ocurrió con el maíz, con el arroz y con todos los demás rubros, recordó que la inflación en los últimos tres meses en los alimentos del campo, las hortalizas registraron cero inflación, dijo Fantinel La Romántica, 88,9FM
