Si Venezuela hubiese sido bien gobernada desde 1999, con sensatez y visión, hoy tendría una economía de más de 500.000 millones de PIB a precios corrientes, de acuerdo con las estimaciones hechas por el economista y profesor universitario, Orlando Ochoa.
Destaca asimismo, a través de su cuenta en Twitter, que el país tendría unos 35 millones de habitantes (sin migrantes), mientras que el ingreso medio per cápita estaría en el orden de unos 15.000 dólares, advirtiendo que lamentablemente la historia fue otra.
Con esta exposición, sustentadas en sus estudios como docente e investigador, el economista expone claramente la gran diferencia que puede existir cuando la economía de una nación, con recursos naturales renovables, se maneja con las políticas económicas adecuadas, aplicadas en función de impulsar un crecimiento y un proceso de desarrollo autosustentable, mediante la ejecución de inversiones suficientes y oportunas para garantizar la calidad de vida de la población.
Por el contrario lo que hemos tenido es un proceso en el cual, a lo largo de dos décadas se dilapidaron cerca de $ 986.000.000.000 millones, en manos de una gerencia más interesada en destruir la economía que en desarrollarla, que mantuvo una recesión durante más de 9 años durante los cuales el PIB cayó en cerca del 80%; el 97 % de la población se empobreció, cerca de 8 millones de venezolanos han migrado huyendo de la crisis económica, política y social y hoy el salario mínimo es apenas un poco más de 5$ por mes, esta es la gran diferencia de la historia.