Trabajo de www.lamananadigital.com
Médicos Sin Fronteras (MSF) advirtió este martes sobre el alto y cada vez mayor número de personas vulnerables -con enfermedades crónicas o embarazadas- que han atravesado este año la peligrosa selva del Darién, que separa Colombia de Panamá y por donde han pasado ya más de 166.000 personas en su ruta hacia Estados Unidos.
«Hemos visto un aumento en los diagnósticos de condiciones crónicas que necesitan especial tratamiento», explicó Priscila Acevedo, médica que da atención en los proyectos de MSF a la salida de la selva, en un comunicado.
Es decir, un aumento en «personas con enfermedades cardíacas, personas que necesitan insulina, personas con problemas de presión arterial y casos agudos de personas que se desmayan por aumento de temperaturas, la falta de alimentos o deshidratación severa», apuntó la médica.
Entre enero y abril esta organización médica ha atendido a 669 personas con condiciones crónicas como diabetes, hipertensión arterial y asma, mientras que en el mismo periodo de 2022 atendió a 262.
Son casos como el de Carlos, un migrante colombiano de 62 años, con diabetes, hipertensión arterial y dificultades cardiacas: «Pensé en varios momentos que mi corazón no era tan fuerte para resistir ese camino. Es algo que no le deseo a nadie, ni a mi peor enemigo», le dijo a MSF este hombre, a quien se le ha cambiado el nombre.
«Hemos recibido incluso personas sin movilidad en las piernas, con parálisis cerebral y con demencia senil», alegó Acevedo, que recordó el caso de un afgano que perdió la pierna en la guerra o una familia de ese país que viajaba con una mujer ciega.