Venezuela es el país con la tasa de embarazo adolescente más alta de América Latina y el Caribe, según datos del Centro de Estudios de Derechos Sexuales y Reproductivos (Cedesex). Esta situación tiene graves consecuencias en la salud, la educación y el desarrollo de las jóvenes madres y sus hijos, así como en la economía y sociedad del país.
Suzany González, directora ejecutiva del Cedesex, explicó que la tasa de embarazo adolescente en Venezuela duplica la tasa mundial y supera a países como Nicaragua, República Dominicana y Brasil.
Esta realidad se debe a la falta de acceso a servicios de salud sexual y reproductiva de calidad, a la ausencia de una educación integral en sexualidad y a la persistencia de patrones culturales machistas que limitan la autonomía y los derechos de las mujeres.
Venezuela tiene una tasa de fecundidad adolescente de 97,7 por cada 1.000 mujeres adolescentes. Esa es una tasa de entre 15 y 17 años porque es la edad en la que se toman en cuenta los embarazos adolescentes; no se toman en cuenta ni siquiera los embarazos en niñas, que es muy grave porque estamos frente a situaciones de abuso infantil”, dijo González.
Además, alertó que el embarazo adolescente no solo afecta el proyecto de vida de las niñas y adolescentes, sino que también incide en el aumento de la pobreza, la deserción escolar, la exclusión laboral y la violencia de género.
Señaló que Venezuela tiene una de las tasas de mortalidad materna más elevadas de la región, lo que evidencia las deficiencias del sistema de salud pública para garantizar una atención adecuada durante el embarazo y el parto.
El Cedesex es una organización no gubernamental que promueve los derechos sexuales y reproductivos en Venezuela desde un enfoque de género y derechos humanos.
Entre sus actividades se encuentran la investigación, la incidencia política, la formación y la sensibilización sobre temas como el embarazo adolescente, la prevención del VIH/SIDA, el cáncer cervicouterino, la violencia sexual y el aborto.