El Hospital Cantonal de Ginebra participará en un ensayo clínico internacional de una vacuna experimental de ARN mensajero (ARNm) que podría reducir en un 65% el riesgo de recurrencia del cáncer de piel melanoma en pacientes con alto riesgo de metástasis.
La vacuna, que se administra en combinación con un medicamento oral, se basa en la tecnología del ARNm, la misma que se utiliza en algunas de las vacunas contra la COVID-19. El ARNm es una molécula que transporta instrucciones genéticas para que las células produzcan proteínas. En este caso, la vacuna induce a las células del sistema inmunitario a reconocer y atacar las células tumorales que expresan ciertas mutaciones específicas.
El jefe del Departamento de Oncología del Hospital Cantonal de Ginebra, Olivier Michielin, calificó los resultados preliminares de la vacuna como «extremadamente impresionantes» y dijo que suponen una revolución en el campo de la vacunología del cáncer. Además, destacó que la vacuna tiene una baja toxicidad y podría ser una opción para aquellos pacientes a los que no se les puede ofrecer inmunoterapia por riesgo de rechazo de trasplante.
El ensayo clínico de fase 3, que comenzará en las próximas semanas y se extenderá hasta el último trimestre del año, involucrará a más de 1.000 pacientes con melanoma en estadio III o IV que hayan sido operados y tengan un alto riesgo de recurrencia. El objetivo es evaluar la eficacia y la seguridad de la vacuna ARNm en comparación con un placebo.
El melanoma es el tipo más agresivo y mortal de cáncer de piel. Según la Organización Mundial de la Salud, cada año se diagnostican más de 287.000 casos y se producen más de 60.000 muertes por esta enfermedad en el mundo. La prevención, el diagnóstico precoz y el tratamiento adecuado son fundamentales para mejorar el pronóstico y la calidad de vida de los pacientes.