La mayoría de la población no quiere saber del gobierno, ni de la oposición, con mucha razón, porque el primero ha cometido muchos errores y la segunda por su incapacidad para construir una alternativa seria, sostiene el doctor Eduardo Fernández, presidente del Movimiento Social e Independiente Unión para el Progreso.
En declaraciones para El Impulso, el también presidente de IFEDEC, el Instituto de Formación Arístides Calvani, manifestó que urge salir de la crisis política, económica, social, de servicios públicos y, sobre todo, moral.
No se respeta la Constitución, es innegable el colapso de las instituciones fundamentales, no existe Estado de Derecho, son violados los Derechos Humanos, hemos retrocedido al centralismo más absoluto y a la ineficiencia total, el régimen ha abandonado la descentralización, la regionalización y la municipalización del poder público, detalla el doctor Fernández. La crisis pone de manifiesto la catástrofe de la política económica: inflación y recesión.
La crisis, además de política y económica, es social, continúa diciendo. La pobreza ha aumentado exponencialmente. El hambre, el desempleo y la miseria conviven con la riqueza extravagante de minorías privilegiadas. La revolución que iba a redimir a los pobres ha transformado a Venezuela en un país de inmigración.
La crisis también es de servicios públicos: No hay agua, ni energía eléctrica, ni educación, ni salud, ni seguridad jurídica para nuestros bienes ni para nuestras personas.
Y para colmo, la crisis moral expuesta en escándalos de corrupción que han alcanzado niveles difíciles de cuantificar, adiciona. El saqueo a los fondos del Estado ha sido espantoso. Hemos perdido la capacidad de asombro ante las enormes cantidades de dinero que se han robado.
Por todo lo expuesto, Venezuela requiere de un cambio de gobierno, plantea. El gobierno que requiere Venezuela es de unión nacional, para que los ciudadanos mejor preparados puedan trabajar para resolver la crisis y empezar de nuevo a cambiar Venezuela.