La Corte Penal Internacional (CPI) ha expresado su rechazo a las «amenazas» recibidas por parte de Rusia tras haber emitido una orden de captura contra el fiscal Karim Khan, colocándolo en una lista de personas buscadas.
En un comunicado, la CPI ha afirmado que «estas medidas son inaceptables» y que «la corte no se dejará intimidar en la realización de su mandato legal de garantizar la rendición de cuentas por los crímenes más graves». Asimismo, ha instado a los 123 Estados miembros del tribunal a «redoblar sus esfuerzos para proteger al tribunal, a sus funcionarios y a su personal».
La CPI decretó en marzo una orden de detención contra Putin y Lvova-Belova, que se basa en la acusación de que ambos son responsables de la deportación ilegal de niños ucranianos y su traslado de zonas ocupadas en Ucrania a Rusia, lo que supone un crimen de guerra según el tratado de este tribunal conocido como Estatuto de Roma.
Sin embargo, Rusia ha reaccionado colocando al fiscal Khan en una lista de personas buscadas por su Ministerio del Interior, sin especificar el motivo. El viernes se pudo ver la foto de Khan en la base de datos del Ministerio del Interior ruso.
Con respecto a la acusación contra Putin, el fiscal, Karim Khan, ha defendido la posibilidad real de que el líder ruso enfrente un juicio por estos hechos y ha citado como ejemplos históricos los Juicios de Núremberg y el proceso judicial por el genocidio de Ruanda.
Khan ha señalado también que la orden de detención contra Putin es un mensaje claro: «Nadie debe sentir que puede cometer un genocidio o crímenes contra la humanidad con impunidad».