La caída de la demanda nacional, la competencia desleal de productos importados terminados, la falta de financiamiento y el exceso de tributos fiscales y parafiscales, generaron una fuerte contracción de la producción y las ventas sufrió el sector químico nacional durante el primer trimestre del presente año.
Guillermo Wallis, presidente de la Asociación de la Industria Química y Petroquímica (ASOQUIM), al dar a conocer los resultados de la encuesta de coyuntura del primer trimestre de 2023, mostró su preocupación por el retroceso experimentado. Propone que las autoridades tomen medidas que propicien la recuperación del sector, entre las cuales destacan tres de especial relevancia: la apertura del financiamiento para el capital de trabajo de las empresas; un freno a la importación de productos importados que llegan sin pago de aranceles y/o en forma ilícita; así como una revisión de los tributos, especialmente del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF).
En cuanto a las ventas, si se comparan las cifras del primer trimestre 2023 versus el primer trimestre de 2022 se observa que 53% de los consultados advirtieron una disminución y solo 30% logró un aumento año a año, pero al cotejar los resultados de los tres primeros meses de este año versus el último lapso de 2022, 79% de los empresarios manifestó que las ventas cayeron. Adicionalmente solo el 51,2% de quienes respondieron el instrumento consideran que en lo que resta de año las ventas podrían aumentar, en contraste con 80% hace tan solo 3 meses.
Asimismo, 48% de la muestra aseguró que la producción de su empresa se redujo mientras que para 45% aumentó. La capacidad utilizada se mantuvo entre 0% y 40% para 83% de los que respondieron la encuesta.
Toda esta situación de contracción del sector genera que 70% de los empresarios piensen hacer solo inversiones operativas de cara a los próximos meses mientras que 25% no invertirá.
Wallis destacó que las razones de estos resultados poco alentadores se producen básicamente por la baja demanda nacional, la competencia desleal de productos importados terminados, la falta de financiamiento, los excesivos tributos fiscales y parafiscales y la incertidumbre en el escenario político e institucional.
Ante la interrogante sobre la situación del país, de su sector industrial y de su empresa comparada con el año anterior, más del 60% afirma que es peor. Y para ese mismo porcentaje de empresas, la expectativa sobre la situación económica para el año en curso es que se mantendrá igual.
Gobierno debe revisar factores que frenan economía
El presidente de ASOQUIM considera que es imperativo que el gobierno nacional revise los factores que están frenando la actividad económica y se tomen los correctivos necesarios que permitan incentivar nuevamente la producción nacional y las ventas. Recordó que el sector químico es transversal al resto de los sectores de la economía y está presente en todas actividades de la industria, el comercio y del consumidor, por lo que urge aplicar medidas que estimulen su reactivación.
Uno de los aspectos clave a tomar en cuenta para una posible dinamización de la economía es el del financiamiento, tanto para el sector productivo como para el consumidor.
Actualmente, las opciones de financiamiento planificadas por el sector en 2023 provienen de aportes de capital de los socios (39.5%); préstamos y líneas de crédito (31,6%) y autofinanciamiento a través de beneficios retenidos (21%).
A pesar de este panorama que no parece muy alentador, 80 % de las compañías del sector químico están dispuestas a invertir en actividades de investigación y desarrollo y en la elaboración de nuevos productos, en la medida en que se empiecen a corregir los factores anteriormente mencionados. Guillermo Wallis reafirmó que el sector químico seguirá haciendo su mejor esfuerzo para producir y generar riqueza para todos los venezolanos, ahorrar divisas al Estado mediante el aumento de la producción local y por tal razón espera que sus planteamientos sean escuchados por el Ejecutivo nacional.