El Presidente de Soluciones para Venezuela, Claudio Fermín, comentó que cualquier acción que afecte la industria petrolera es un atentado contra la población venezolana, debido a que por años esta es la mayor fuente de ingreso económico para el país.
“Haber puesto PDVSA en manos de comisarios políticos cuya tarea era colocar activistas para mantener al partido de gobierno fue un acto de irresponsabilidad y malversación administrativa que dañó el funcionamiento de la empresa”, explicó.
Esto se da luego de las acusaciones de corrupción contra miembros de la estatal petrolera que según fuentes de ambos bandos políticos afectó el desarrollo de la industria y por ende la economía venezolana.
“Los resultados de esas desviaciones se vieron con los años: bajón de más de dos millones de barriles en la producción; abandono de las refinerías; pérdida de mercados. Sin embargo, haber contado durante más de diez años con el precio del barril por encima de los $100 tapaba todo eso en una opinión pública poco informada. PDVSA ya no era importante en el cuadro de empresas petroleras mundiales y el país se colocaba con una participación marginal en el mercado de hidrocarburos” comentó en referencia al declive de la petrolera.