La aplicación de mensajería instantánea, Telegram, funcionó hasta la noche del 26 de abril en los teléfonos de los brasileños tras la orden de la Corte Suprema de Brasil.
El motivo de esta decisión llega por solicitud de la policía federal, ya que argumentan que la aplicación es utilizada en su país para propagar discursos de odio, tráfico de drogas, comercio de dinero falso, propaganda extremista y hasta venta de certificados de vacunación.
A partir de este momento todos los proveedores de internet tendrán que eliminar Telegram, así como las plataformas digitales y las tiendas de aplicaciones, de lo contrario se podrán enfrentar a sanciones, según datos suministrado por g1.
Brasil no es el primer país que opta esta medida contra esta aplicación, los primeros fueron China e Irán en 2015 y desde entonces son 15 los países que han eliminado Telegram contando al país sudamericano.
