La población venezolana tiene una gran desmotivación sobre el tema político y, por tanto, no sólo castiga al gobierno sino también a la oposición.
Afirmación en tal sentido hace Luis Vicente León, presidente de Datanálisis, al ser entrevistado por El impulso en relación con las precandidaturas que están en la calle con miras al proceso de elección primaria del 22 de octubre.
Su conexión con la Primaria es todavía muy lejana, expone. No tenemos números atractivos para proyectar una participación masiva en esa elección.
Sin embargo, los eventos electorales son motivantes en la medida que avanza su desarrollo y es posible que tenga un mayor acercamiento de la gente en los próximos meses.
–¿Qué indican las candidaturas de María Corina Machado y la del Conde del Guácharo, Benjamín Rausseo, que al parecer se están peleando el favoritismo?
-La oposición se divide en tres segmentos distintos: los moderados, donde los candidatos están fracturados, porque ahí los dos grandes candidatos son Manuel Rosales y Henriquez Capriles; los radicales en los que María Corina Machado si aparece fuerte porque es la única de ese segmento y los aglutina; y el Conde del Guácharo, que aglutina y monopoliza el segmento de los irreverentes de la política. El Conde y María Corina tienen niveles de soporte similares, pero tampoco tienen una gran ventaja. La gente habla de fenómenos electorales como si estos actores tuvieran grandes potencias.
Esta es una batalla de liliputienses, aseveró. María Corina tiene 13 por ciento de disposición del voto; el Conde también tiene 12 por ciento; Rosales llega al 9 por ciento y Capriles, 7 por ciento.
Todos están muy cerca, pero todos son chiquitos, comentó. Hay que esperar cómo se desenvuelve la campaña. Y se está a la espera de alianzas que puedan sacar a un candidato más fuerte.
En torno a los moderados, que constituyen el grupo más grande, dejó entrever la posibilidad de que surja un consenso.