Salida de Guaidó alivia al régimen y fortalece a los emergentes de la oposición #26Abr

La salida del país de Juan Guaidó a Colombia y su posible exilio en los Estados Unidos alivia al régimen y, al mismo tiempo, obliga a los partidos tradicionales de oposición a trazar un nuevo rumbo para su participación en la Primaria, y así mismo fortalece a los aspirantes emergentes que están en campaña.

También le amplía el espacio al gobierno estadounidense para formalizar acuerdos económicos con Nicolás Maduro, por cuanto ya no estará pendiente de la suerte que pudiera correr Guaidó, quien ya había sido amenazado con ser arrestado, enjuiciado y condenado por el régimen.

Estas son las observaciones que tiene Santiago Andrés Rodríguez, politólogo y profesor universitario, en análisis que hizo para El Impulso sobre el dirigente y la política nacional:

1. En este momento, expuso, Guaidó está en un status de exilio. Esta situación conlleva a que ya no sea candidato al proceso electoral de Primaria y su organización política, Voluntad Popular, tendrá que sacar un nuevo aspirante o apoyar a otro de los partidos que conforman el llamado G-4.
2. En el supuesto caso que Guaidó ganara las primarias, inevitablemente, sería bloqueada su candidatura presidencial, porque sobre él, desde hace dos años, pesa una inhabilitación de la Contraloría General de la República para ejercer cargos públicos por no haber formulado la declaración jurada de patrimonio y, aparte de eso, el oficialismo le señala de usurpar funciones por haber presidido la Asamblea Nacional después de terminado el período de ésta. Y, además, haberse proclamado presidente de un gobierno interino.
3. Su ingreso a Colombia esta semana fue ilegal, confirmó el canciller colombiano, Álvaro Leyva y, por tanto, advirtió que podría ser deportado, motivo por el cual acudió a la embajada de los Estados Unidos y viajó a Miami, donde permanece. En la cumbre de Bogotá, su partido está representado en el G-4, y la cancillería de aquel país dijo que era un encuentro de cancilleres y no de líderes políticos, ni tampoco que Guaidó había sido invitado. Y, desde el punto de vista político, Guaidó seguirá haciendo política desde el exterior y jugará un papel parecido al que ha venido haciendo Leopoldo López, conectándose con otros países y abordando temas, como el de la liberación de los presos políticos y el de que haya elecciones libres, transparentes y supervisadas en Venezuela; pero, de momento, no podrá ya participar internamente en la contienda política.
4. Realmente, en el momento en que Guaidó salió del país, los números de las estadísticas sobre su nombre como precandidato presidencial no le estaban favoreciendo. Su popularidad avasallante cuando comenzó el interinato del gobierno se fue perdiendo cuando fracasaron las expectativas de su propuesta “Cese a la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres”, la ayuda humanitaria trancada en la frontera, las denuncias por malas gestiones en Monómeros y otros hechos. Esa situación no sólo le afectó a él, sino también a los partidos opositores y se ha podido observar un fuerte cansancio hacia el liderazgo y las organizaciones partidistas tradicionales, asi como a los candidatos que representan el status quo y por eso se está viendo a esas candidaturas off side de personas que no están en el stablisment político. Estoy seguro que si Guaidó hubiera participado en esta Primaria no saldría favorecido. Y en este momento no veo que ninguno de los candidatos del G-4 esté captando apoyos, ya que están polarizadas las preferencias entre la señora María Corina Machado y Benjamin Rausseo. Y si en esta Primaria el Consejo Nacional Electoral pone en funcionamiento las captahuellas, María Corina Machado ha dicho que no participará. Sin embargo, todavía faltan seis meses para que se elija al candidato, trecho que podría dar sorpresas como ocurrió cuando Irene Sáez estaba de favorita y finalmente fue Hugo Chávez el que ganó la carrera presidencial.
5. Lo cierto es que la situación política de ahora es muy parecida a la que se vivió en los años en que apareció Hugo Chávez con el cansancio de los partidos y el desprestigio de la democracia, la corrupción y el surgimiento del chiripero con Rafael Caldera. Una de las cargas más pesadas que tiene sobre sus hombros Nicolás Maduro es la corrupción desbordada y la impunidad que ha prevalecido. Es probable que el régimen haya tenido que desmantelar, según se ha dicho, la 31 trama de corrupción no porque se haya comenzado una lucha contra los corruptos, sino porque el impresionante delito ha traspasado fronteras y cada país tiene sus intereses propios que defender. Dentro de las prioridades de los Estados Unidos existe una lucha contra el acecho del terrorismo, por lo que no es de extrañar que se ha dado este golpe como una de las peticiones de Joe Biden haya hecho en las relaciones que ciertamente hay con Venezuela, para flexibilizar las tensiones. Ya ha levantado sanciones y se le ha dado libertad a los sobrinos de la pareja presidencial venezolana, marchan muy bien los tratos con la Chevrón y, en fin, siguen conversando con Maduro. Pudiese ser que el gobierno estadounidense haya pedido sacar del juego a Tarek El Aissami, una de las figuras sancionadas por estar supuestamente vinculado a grupos terroristas y considerar que Venezuela podría convertirse en un satélite de Hezbolá o de cualquier país terrorista. Y no es de extrañar que ese acercamiento de ambos gobiernos lo haya visto Guaidó muy peligroso para su seguridad cuando tiene amenazas de ser aprehendido y no contar ya con el apoyo de los Estados Unidos por no ser considerado, como lo fue durante tres años, presidente de un gobierno interino.
6. Probablemente, desde el punto de vista político, Guaidó busque victimizarse porque sabe que ya fuera de Venezuela, el régimen no sólo aprovechará para descalificar, sino para hacerle acusaciones de corrupto y de todo lo que se puede esperar de una campaña de descrédito contra quien fue respaldado por más de cincuenta países y estuvo en la Casa Blanca como invitado especial.
7. Como las conversaciones entre el régimen y la oposición venezolana están trancadas en México, la celebración de la reunión de Bogotá es de fundamental importancia para los Estados Unidos y para el propio Gustavo Petro en el sentido de buscar una salida a la crisis de Venezuela. Colombia es el principal socio de los Estados Unidos en la región y aunque el presidente colombiano es amigo de Maduro, estaría interesado en que haya un gobierno de transición en Venezuela porque la frontera que comparte ambos países es muy explosiva. El restablecimiento de la democracia es un punto de honor para los Estados Unidos y, por tanto, ha pedido a su principal socio participar en la búsqueda de una solución a una situación que ha llevado a más de siete millones de venezolanos fuera de su territorio, lo que ha ocasionado una crisis humanitaria muy grande. Se requiere por otra parte el petróleo venezolano que por casi cien años fue adquirido por el mercado estadounidense y se trata, además, de que la región controle la violencia.
8. La salida de Guaidó alivia al régimen porque ya no podrá poner preso a Guaidó en momentos en que las miradas del mundo están sobre la falta de seguridad que tienen los presos en las cárceles, máxime cuando en el Helicoide murió el 20 de abril de este año uno de los personeros más importantes de la administración pública como fue Leoner Azuaje, uno de los detenidos por la trama de corrupción.
9. Por último, yo estoy viendo en el panorama político venezolano un cambio importante: el cierre de un ciclo político para que empiece otro ciclo que tiene que ver con la oposición y el gobierno. Siento que ha comenzado una transición dentro de los factores democráticos que hacen oposición a Maduro. Hay un acuerdo en factores que han sido chavistas con la oposición, sobrepasando su fuerte antagonismo, en la búsqueda de una salida pacífica y de reconciliación. Esta actitud podría culminar en un gran movimiento social y en un sismo en la oposición, en la cual van a caer algunos actores y surgir otros. La mayoría de los venezolanos no quieren seguir confrontando y si bien es cierto que se han despartidización no se han despolitizados. Tienen observaciones sobre los partidos, pero siguen actuando políticamente y por eso es que estamos viendo, desde comienzos de enero, a gremios de educadores luchando por sus reivindicaciones, a gente manifestando y reclamando salud y, en fin, fomentando una protesta por todas partes, no al lado de los dirigentes partidistas sino de sus líderes sindicales y gremiales. Es una Venezuela que se quiere conectar no con actores viejos, y creo que con la Primaria, sea cual sea el resultado, vamos a tener nuevos líderes que reemplazarán a los que hemos tenido en todos estos años.