“El éxito no es un accidente. Es el resultado de un trabajo duro, perseverancia, aprendizaje, estudio, sacrificio y, sobretodo, amor por lo que estás haciendo o aprendiendo a hacer»
Pelé
Dinero y éxito sin esfuerzo, es así como el perezoso disfruta la vida.
Hoy en día me he dado cuenta, que en algunas personas la pereza es un hábito mental, una manera y una forma de relacionarse con los demás y con el mundo. En su esencia está la tendencia a lograr sus propios deseos sin mucho esfuerzo. Pero realmente ninguno. No le es suficiente obtener el resultado con el menor esfuerzo posible.
El perezoso, pone el ahorro de esfuerzo en primer lugar, a la base de sus decisiones. Si algo requiere mucho empeño no lo hace. Esto le vale tanto para el esfuerzo físico como para el mental. Por esta razón no programa su futuro, lo imagina, lo fantasea. Sueña con tener un buen trabajo, una familia, el éxito e incluso un buen emprendimiento, pero no prepara los medios para lograrlo. Los pospone. Si es joven y lo mantienen sus padres, permanece en familia y encuentra miles de justificaciones para no irse de su casa. Si logra tener un trabajo sedentario es feliz. Si llega a un puesto de mando se instala allí. A veces engorda, pesa más y todo se vuelve aún más cansado para él, incluso mudarse de casa o irse de viaje. Siempre se pospone. A veces también pospone pagar sus deudas, hipotecas, préstamos, multas, esperando incluso que los otros lo olviden.
Los perezosos, buscan siempre inmediatas soluciones, que se obtengan rápidamente. Al verlos así, lentos y pacíficos, se puede pensar que son tenaces y pacientes. En realidad no, si quieren algo, la quieren inmediatamente y sin mover un dedo. En realidad su ideal es recibir el dinero en la casa sin trabajar y que siempre exista alguien que se lo provea.
Al verdadero perezoso, le encantan los hábitos y la comodidad, cuando los ha conquistado las disfruta y no las quiere dejar. Cuando le piden hacer cualquier cosa responde que sí, porque es más complicado decir que no. De todas maneras al final no lo hace.
Naturalmente, como cada ser humano quiere también ser apreciado y estimado, y le fastidian las críticas que recibe porque se retrasan en los envíos o entregas o porque no ha mantenido la promesa, por eso entonces para defenderse miente, inventa cualquier excusa, dice una mentira. Muchas veces lo primero que pasa, luego, por pereza, a veces lo olvida.
Definitivamente, algunas personas creen que es posible lograr el éxito sin trabajar duro y sin ningún mayor esfuerzo. Estas personas pueden creer que el éxito es algo que se puede obtener fácilmente, sin tener que trabajar duro o dedicarse a algo. Sin embargo, esta mentalidad puede ser peligrosa, ya que puede llevar a la complacencia y la falta de motivación. Por otro lado y gracias a Dios, existen otras que creen que el éxito requiere esfuerzo y dedicación. En este grupo están los Emprendedores exitosos y verdaderos.
Italo Olivo
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