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La madrugada de este miércoles, 5 de abril, se conoció que el abogado Hugo Cabezas, quien ha detentado cargos de importancia dentro del chavismo, fue presentado ante un tribunal especial por su presunta participación en hechos de corrupción en Cartones de Venezuela (Cartoven), empresa que dirigía, así como en la Corporación Venezolana de Guayana (CVG).
La información la reveló el vicepresidente de Comunicación, Cultura y Turismo, Freddy Ñánez, a través de su cuenta en Twitter.
Cabezas fue llevado a la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) para su imputación junto a otras 12 personas en el marco del operativo anticorrupción “Caiga quien Caiga”.
Su sombrío paso por la Onidex
Hugo Cabezas debutó como figura política del chavismo en el año 2003. Según reseñó el periodista César Batiz en un tuit del año 2019, Cabezas saltó de Utopía 78 al escenario nacional cuando le entregan la dirección de la Misión Identidad a Tareck El Aissami y este lo nombra como director de la Onidex, ahora Saime.
Desde allí empezó a escalar en el estamento chavista. Cabezas, junto a El Aissami, diseñaron operativos masivos de cedulación promovidos por órdenes de Chávez con los que el fallecido presidente logró asegurarse una sólida base electoral, al cedular tanto a venezolanos como a extranjeros en el país.
No fueron pocas las denuncias sobre irregularidades en estos procesos en los que, supuestamente, se trasladaban máquinas y personal de la Onidex hasta sitios remotos del país e, incluso, fuera del territorio nacional, para darle la identidad venezolana a ciudadanos colombianos.
En mayo de 2007, el reconocido narcotraficante colombiano Farid Dominguez, apresado en Caracas y deportado a Colombia, confesó que mantenía vínculos con generales de la Guardia Nacional y altos funcionarios de Venezuela.
Farid Domínguez incluso declaró que mantenía contactos con el entonces director de la Oficina Nacional de Identificación, Hugo Cabezas.
Según Domínguez, Hugo Cabezas “personalmente” le habría ofrecido ordenar la tramitación de su cédula y pasaporte venezolano. “Vas a nacer en Venezuela”, le habría dicho Cabezas al narco para garantizarle la obtención de sus documentos venezolanos.
Nepotismo y presunta corrupción en Trujillo
Entre 2008 y 2012, Cabezas estuvo al frente de la Gobernación del estado Trujillo, pero luego de varias denuncias en su contra por 700 casas que no fueron construidas en la entidad, Hugo Chávez nombró a otro candidato para que lo relevara en el siguiente período.
A esos reclamos de su paso por la gobernación de Trujillo se sumaron otras acusaciones que surgieron del propio seno del chavismo. Desde el PSUV advertían que le pasó por encima al equipo político del partido para conformar unilateralmente su gobierno regional «con un grupo de amigos y familiares procedentes de otras regiones del país».
El portal web La Guarura de la Universidad Atónoma Indígena publicó un texto que titularon «72 razones por las cuales Hugo Cabezas no debe estar más nunca en un organismo de Gobierno» en el que se hacían fuertes señalamientos contra el exgobernador, que iban desde corrupción, abuso de poder, mala gestión, robos y hasta ataques a disidentes.
«Es copeyano de nacimiento, militaba en Copei en sus tiempos de estudiante (…) hizo un desastre administrativo (corrupción administrativa) con los recursos de la nación, siendo gobernador del estado Trujillo entre 2008 y 2012″, expresaban en dicho texto.
Descabezó a medios impresos limitando acceso al papel
Tras salir del poder regional, en 2013 fue designado director del Complejo Editorial Alfredo Maneiro (Ceam) por el entonces ministro de Comunicaciones, Ernesto Villegas.
Cabe recordar que para el año 2012, el Gobierno de Chávez eliminó el papel prensa como bien de importación prioritaria, mecanismo que permitió hasta entonces obtener divisas a precio preferencial a quienes desearan comprar el producto en el exterior.
El Ceam fue creado, según reseña la ONG Espacio Público, para monopolizar la venta de papel periódico en Venezuela:
“Considerando la importancia de difundir información sobre la gestión gubernamental para generar ‘una nueva conciencia ciudadana, como un pilar en el proceso de construcción del hombre nuevo’”.
De esa forma, y durante su gestión en la Corporación Maneiro, Hugo Cabezas cavó la tumba de decenas de medios de comunicación impresos que circulaban en el país.
Según reseña la ONG Espacio Público cuando inició el gobierno de Nicolás Maduro en 2013, circulaban 134 impresos. Para agosto de 2018, solo quedaban 64 en todo el país; es decir, la oferta informativa impresa se redujo entre 47% y 51%, en buena medida por la dificultad de tener acceso al papel.
El Observatorio Venezolano de Fake News señaló que el 69% de los medios impresos cerraron entre 2010 y 2022.
Su paso por otros cargos
En 2014 fue ministro del Despacho de la Presidencia de Maduro. Un año después, asumió la conducción del Servicio Autónomo de Imprenta Nacional y Gaceta Oficial (Saingo).
El 29 de octubre de 2018 fue designado como gerente general de Operaciones y Administración por la junta administradora de la empresa Smurfit Kappa Cartones de Venezuela.
El 13 enero de 2014, Pedro Eusse, dirigente del Partido Comunista de Venezuela, hizo fuertes señalamientos de corrupción en contra de Cabezas. “Se trata de un ciudadano que arrastra una lista de serias denuncias de corrupción. Cabezas no cumple con el perfil ético de la revolución, por eso creemos que su designación es un error”.
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