El problema de desabastecimiento de combustible se ha convertido en una situación agobiante para todos quienes se movilizan en vehículos automotores y necesitan desesperadamente llenar sus tanques de gasolina, pero ahora además de las grandes colas hay otra irregularidad y es la presencia de vendedores ambulantes que se desplazan en bicicletas de reparto y otros vehículos de tracción a sangre en contravía, lo cual es un peligro.
Estas personas se desplazan en contravía paralelo a las grandes colas que se hacen para llegar a las estaciones de servicio, que generalmente ocupan varios kilómetros y el caso es que al ir en sentido contrario pueden causar daños a los peatones que intentan cruzar la calle y miran en el sentido por donde vienen los carros.
Un caso particular es el de la avenida Lara, al este de Barquisimeto, donde las paradas de autobús hasta la estación de servicio Churún Merú están siempre ocupadas por los vehículos que están en la cola esperando para echar gasolina y los transportistas tienen que dejar a los pasajeros en el medio de la calle y ahora vienen los vendedores de chicha y refrescos en contravía y ocupan un tercer canal cuando la buseta esta parada. No es fácil de entender, pero está ocurriendo.
Esto ocurre muchas veces frente a los efectivos de seguridad que resguardan las bombas donde se surte la gasolina y por ello el llamado es a que estén más pendientes porque de estas imprudencias lo que se puede generar es que se produzcan daños materiales a los vehículos y peor aún, que alguien salga herido.